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29 autores en total. 13 hombres y 16 mujeres que se han alzado con el Premio Azorín de Novela. De todos ellos, solo tres son de la provincia. Alicante, Elche y Orihuela son sus lugares de nacimiento. Es en esta nueva edición del galardón, su número 30, donde han aparecido 21 novelas firmadas por autores de 'la terreta', quienes quizá alguno de ellos esté entre los diez finalistas.
La última alicantina en alzarse con este galardón fue la ilicitana Mónica Carrillo, periodista, escritora y uno de los rostros más famosos del fin de semana en televisión. Con su obra 'La vida desnuda' convenció al jurado de la edición 2020 del Premio Azorín para coronar su novela con este sello tan especial para la provincia.
Hasta llegar a ella pasaron 16 años desde el último alicantino que se proclamó ganador de este premio. Fue en 2004 cuando Manuel Mira lo hizo con 'El secreto de Orcelis'. Nacido en Orihuela, dedicó su vida al periodismo y la escritura. Destacó en su profesión por ser redactor jefe de La Verdad y ABC, además de columnista en Las Provincias. También fue presidente de la Asociación de la Prensa de Alicante.
Antes que Mira, el premio recayó en un alicantino de renombre. Conocido por sus investigaciones, estudios y obras dedicadas a la figura del poeta Miguel Hernández, José Luis Ferris fue el primer alicantino en llevarse el Premio Azorín. Lo hizo en el año 1999 con 'Bajarás al reino de la tierra'.
Bajo el sello planeta y con un cintillo identificativo, han sido 29 las novelas que han portado el orgullo de ser Premio Azorín. Para conocer la número 30 quedan, apenas, horas. Será este jueves cuando el jurado de esta edición ponga título y autor a la obra que lleve por signo al autor monovero de la Generación del 98.
La historia de este premio se remonta al año 1994, donde comenzó la alianza entre la Diputación de Alicante y la editorial Planeta para distinguir a los escritores con este galardón. El primero de ellos fue Gonzalo Torrente Ballester con 'La novela de Pepe Ansúrez', a quien siguió en 1995 el autor Luis Antonio de Villena con 'El burdel de Lord Byron'.
Tras ellas continuaron en los últimos años del milenio las obras de Luis Racionero con 'La cárcel del amor', Jesús Ferrero con 'El último banquete', Daína Chaviano con 'El hombre, la hembra y el hambre' y el alicantino José Luis Ferris con 'Bajarás al reino de la tierra'.
Fue la autora Dulce Chacón la primera en estrenar el Premio Azorín en el nuevo milenio. Se hizo con el galardón en el año 2000 de la mano de 'Cielos de barro'. Este título sirvió también para realizar un avance en el diseño de portada de todos los que estaban por llegar. En este momento fue cuando las imágenes ocuparon el diseño completo, a excepción de un cintillo identificador del sello Azorín.
Tras ella llegaron Luisa Castro con 'El secreto de la lejía', Eugenia Rico con 'La muerte blanca', Javier García Sánchez con 'Dios se ha ido' y el oriolano Manuel Mira con 'El secreto de Orcelis' en 2004.
El cambio de estética continuó en Planeta cinco años después. El triunfo de Ángela Becerra con 'El penúltimo sueño', logró acercar la imagen de la tapa dura al estilo de las portadas más actuales. Una fotografía a sangre en sus lomos, el sello de la editorial expuesto de forma independiente y el símbolo del Premio Azorín reducido a una línea de texto minimalista que permitía identificar el año y el distintivo.
A ella le siguieron Javier Pérez con 'La crin de Democles' y Jon Jauristi con 'La caza salvaje'. Ya en ambos volúmenes se aprecia también la exposición del sello Autores Españoles e Iberoamericanos sobre su carátula, otro distintivo que ha perdurado -en su lomo- hasta la actualidad.
Tras ellos continúan Montero Glez con 'Pólvora negra' en 2008, Lola Beccaria con 'El arte de perder', Begoña Aranguren con 'El amor del rey', Pepa Roma con 'Indian Express', Almudena de Arteaga con 'Capricho', Zoé Valdés con 'La mujer que llora' y Ramón Pernas con 'Hotel Paradiso'.
Es en 2015 cuando surge otro cambio en el diseño de las portadas de los títulos galardonados con el Premio Azorín. Se aprecia en 'Sus ojos en mí' de Fernando Delgado donde el sello de Autores Españoles e Iberoamericanos deja la carátula para trasladarse al lomo de los ejemplares que llegaron años más tarde.
Así se aprecia en los títulos siguientes como son 'Dispara a la luna' de Reyes Calderón, 'Llamadme Alejandra' de Espido Freire, 'La silueta del olvido' de Joaquín Camps, 'Quiéreme siempre' de Nuria Gago, 'La vida desnuda' de la ilicitana Mónica Carrillo, 'El santuario de los elefantes' de Nativel Preciado y 'La biblioteca de fuego' de María Zaragoza, Premio Azorín 2022.
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