Las obras de ampliación de Casa Mediterráneo ofrecerán nuevos reclamos culturales para Alicante

Han sido varios los proyectos que se han pensado para dar una nueva vida a la nave-taller anexa a la antigua estación de Benalúa. Desde instalaciones deportivas hasta la subsede del Museo del Ferrocarril. Sin embargo, su actual inquilino, Casa Mediterráneo, tiene claro que esta infraestructura se debe abrir a la ciudad de Alicante y al barrio de Benalúa.

Su director general, Andrés Perelló, explica a preguntas de TodoAlicante sus intenciones de adjudicar las obras de rehabilitación a finales de año, con el fin de volver a incluir este espacio en el entorno de la Casa y, con ello, ganar nuevos espacios en el interior de lo que en su día sirvió estación. Estas también incluyen el proyecto de ajardinamiento en la zona de vías, las cuales se mantendrán y sobre ellas reposará un vagón cafetería.

El primer paso para convertir en realidad esta idea tiene previsto darse en septiembre, con una reunión a tres bandas entre Casa Mediterráneo, Adif y el Ayuntamiento de Alicante. En ella se «perfilarán los últimos detalles». Y es que la institución diplomática ha instado al Consistorio a ceder su contrato de arrendamiento de la nave-taller y, con ello, se aprovecharía al máximo el proyecto «redactado y pagado por el Ayuntamiento» para albergar la subsede el Museo del Ferrocarril.

Sin embargo, sus fines serían diferentes. El inicial contempla, según expone Perelló, 80 metros cuadrados destinados para el museo y el resto -cerca de 400 metros cuadrados- para albergar y cubrir una máquina de tren, «una locomotora Mikado antigua de primeros de siglo que cuesta cientos de miles de euros de traer». Al conocer este proyecto, «pensamos que con esos recursos se podía hacer una infraestructura más social y rentable» y con «mejor futuro».

En este sentido, Perelló defiende la proximidad y el arraigo de Casa Mediterráneo en la ciudad y la provincia de Alicante, con especial hincapié en el barrio de Benalúa. Por ello, propone «ganar espacios y edificios» con la rehabilitación de la nave-taller en un momento en que «las actividades y expectativas han crecido hasta un nivel en que necesitas» más infraestructuras, pues por «las características de la Casa necesitas algo cerrado», ya que en los meses de invierno «no te puedes arriesgar» con actividades en el Espacio Azul.

El nuevo proyecto para rehabilitar la nave-taller anexa a Casa Mediterráneo plantea la creación de un plató digital que sirva para realizar conferencias, grabaciones «en formato más doméstico» y contar con los elementos necesarios para ello, además de tecnología 3D. Asimismo, también incluye la creación de nuevos espacios -ganados también de los antiguos almacenes- para realizar exposiciones, charlas, conferencias y otras actividades, además de crear una biblioteca y salas de trabajo.

Las obras prevén también el traslado de los baños y aseos a esta nueva infraestructura, de forma que sean comunes entre la nave y la estación. Con ello se podrá ganar un segundo ágora en el interior de Casa Mediterráneo, donde celebrar más encuentros y ampliar el aforo. «A un centro cultural van 20 personas y aquí tenemos que colocar una pantalla fuera porque el ágora se llena», incide Perelló. «Es la Casa (de la Red del Ministerio) que más rentabiliza la infraestructura en el sentido de la oferta cultural».

De este modo, la incorporación de la nave-taller a la sede de Casa Mediterráneo permite ampliar sus actuales instalaciones y dotarlas de nuevos espacios pensados también para la ciudad. Por ello, el nuevo proyecto, basado en el impulsado por el Ayuntamiento, incluirá modificación de accesos para conectar la infraestrcutura con el barrio y climatización, aspectos que «no estaban previstos en la subsede del Museo del Ferrocarril».

Asimismo, se conservarán las vías que conectaban la línea con el taller y con la estación. En el primer caso, uno de sus tramos permanecerá al descubierto bajo protección de cristal. «Todo ello sostiene el relato de la Casa, que es una estación y contaba con una nave-taller». También, continuarán -tras la petición a Adif de ceder el suelo la parte trasera de la estación a Casa Mediterráneo- los raíles por los que accedían los trenes. Sobre ellos se colocarán dos vagones fijos, uno de ellos convertido en cafetería.

Con estas obras de rehabilitación y el logro de nuevos espacios, «la Casa funcionará durante 30 años más». Para su ejecución, Casa Mediterráneo cuenta con 800.000 euros bloqueados para su ejecución -sumados a posibles subvenciones de los fondos Perte para el plató digital-, no obstante mantendrían conversaciones con el Ministerio de Asuntos Exteriores, Unión Europea y Cooperación del Gobierno de España para solicitar ayuda económica para las actuaciones de ajardinamiento y conexión con el barrio.

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