La Sanidad a consulta: estas son las 'recetas' de los políticos para el 28M

Todos los partidos sin excepción coinciden en hacer el siguiente diagnóstico: hay que potenciar la Atención Primaria, reducir las listas de espera quirírgicas, y no desatender la salud mental. Sin embargo, profundas diferencias separan a ambos bloques en cuanto al modelo de gestión de los centros sanitarios o el uso del valenciano en la administración.

A continuación, hacemos una radiografía de los programas electorales de aquellos partidos que más opciones tienen de conseguir representación en el parlamento autónomico tras los comicios del 28 de marzo.

Los socialistas apuestan por seguir con su hoja de ruta en la reversión de centros hospitalarios privatizados durante el gobierno autonómico del PP. En nuestra provincia, serán los Hospitales de Dénia y del Vinalopó los que seguirán la senda marcada por el de Torrevieja en 2021, de acuerdo a las intenciones del partido de Puig.

En esa línea estratégica, la formación también habla de impulsar un «nuevo modelo de arquitectura sanitaria», algo que implicaría «resetear el sistema», según palabras del propio president. Algunas medidas llamadas a conseguir esa ambiciosa empresa van dirigidas a rebajar a menos de 70 días la espera para una operación quirúrgica de cualquier especialidad. Según los últimos datos disponibles (mes de marzo) la demora está en 77 días de media, aunque en el pasado año se llegó en algunos meses a 115.

En el ámbito de la atención primaria, prometen servicio de Urgencias 24 horas en los centros de salud, y que los puntos de atención continuada (PAC) sean una realidad en todos los municipios de más de 10.000 habitantes. Otras medidas contemplan la ampliación de la prueba de cáncer de colon hasta los 74 años, así como la actualización de las pruebas de diferentes patologías.

El Partido Popular no se ha pronunciado claramente durante esta campaña al respecto de si pondrá freno o no a la política de reversiones del actual Consell. Pero eso no ha impedido a los populares criticar con dureza la forma en que se ha llevado a cabo el cambio de titularidad en el Hospital de Torrevieja. 

Los caballos de batalla de la formación en materia sanitaria suponen el «blindaje» del presupuesto de Sanidad a un mínimo del 30% sobre el global del presupuesto en esa parcela, así como la garantía por ley de que cuando la espera para una prueba diagnóstica supere los 50 días, se proceda a la derivación a la gestión privada. También plantean un límite de 90 días para las operaciones quirúrgicas, y de 48 horas para ser atendidos por el médico de cabecera. 

Por lo que se refiere a la acreditación del valenciano para el personal sanitario, descartan que se exija como un requisito, y proponen relegarlo a la condición de mérito o complemento. En otro orden de cosas, prometen un plan de incentivos para plazas de difícil cobertura, así como la creación de una dirección general de Atención Primaria.

Compromís va más allá de la apuesta por fomentar la sanidad pública, ya que plantean «blindarla» mediante el Estatuto de Autonomía para impedir que haya más privatizaciones. Ello también implica dejar de «desviar» recursos públicos para asumir los gastos de los seguros privados en los espectáculos taurinos, o que el sistema trabaje «libre de los intereses económicos» de la industria farmacéutica. La cobertura sanitaria que plantea la formación también debe conllevar un programa de salud visual. 

En la atención primaria plantean que las citas se den con un margen máximo de 72 horas, que la inversión del área aumente al 25% del total del presupuesto sanitario, y que cada centro de salud tenga personal de fisioterapia y nutrición. La formación también quiere garantizar las interrupciones voluntarias del embarazo en los centros sanitarios públicos, con el acompañamiento necesario y garantizando la capacidad de decisión; así como la creación de un Observatorio de la Muerte Digna para valorar el cumplimiento de los derechos de las personas en los procesos de atención al final de la vida.

En Podem son partidarios de una gestión directa de todos los servicios sanitarios, por lo que proponen seguir avanzando en el modelo de desprivatización de la sanidad pública. Eso incluye el impulso desde el Consell de una industria farmacéutica pública; la inclusión de la salud bucodental en los servicios públicos; así como la ampliación de la atención a la salud mental. A su vez, también plantean incrementar la inversión en Atención Primaria del 14 al 25 %.

En su idea de una España centralizada, Vox propugna la devolución de las competencias de las comunidades autónomas en materia sanitaria al Estado, revertiendo así el modelo instalado de forma general para todo el país en 2003. En su documento programático 'Agenda España' también se puede leer como quieren suprimir de la Sanidad pública las intervenciones quirúrgicas «ajenas a la salud (cambio de sexo, aborto, eutanasia...)», así como garantizar la libertad de conciencia para todos los profesionales sanitarios ante las «imposiciones de la cultura de la muerte, aborto o eutanasia».

Entre otras cosas, también son partidarios de implantar un programa de prevención para población infantojuvenil sobre adicción a los videojuegos, a los juegos en línea y redes sociales de niños y jóvenes; o el aumento de todas las plantillas del sistema sanitario hasta llegar a una relación de cuatro médicos por cada diez habitantes.

Ciudadanos plantea mejoras en las condiciones de los MIR, entre ellas la oferta de contratos estables a los que realicen su formación en la Comunitat, así como agilizar la gestión de las bolsas de empleo sanitario. También defienden un aumento de las plazas de medicina geriátrica y enfermería familiar, o la creación de una conselleria exclusiva de diversidad funcional. En el ámbito de la salud mental, proponen la creación de un cheque que incluya visita psicológica y psiquiátrica.