Pedro Luis lo da todo con una apoteósica mascletà antes de las Hogueras

Ha sido, en esta ocasión, la plaza del Alcalde Agatángelo Soler la que ha servido para lanzar uno de los últimos cuatro disparos del ciclo 'Pòlvora tot l'any', que precede al concurso oficial de mascletàs de Luceros. El encargado de poner a bailar a los alicantinos, foguerers y barraquers al ritmo de la pólvora ha sido el maestro Pedro Luis Sirvent.

El ritmo ha comenzado a primera hora de este sábado, cuando los festeros del distrito han comenzado a plantar las carpas y vallas en la zona. Un almuerzo popular ha servido para recrear el ambiente de las Hogueras durante la espera de la mascletà, a la que según pasaban los minutos acudían más y más personas.

Las belleas del foc, Belén Mora e Inés Llavador, y sus dames d'honor han saludado al público que esperaba ansioso el disparo de Hermanos Sirvent antes de acceder a la zona de autoridades, donde han dado su tradicional grito de arranque. En esta ocasión ha ido dedicado a las empresas y colaboradores de las Hogueras. Tras ello, se ha escuchado el mítico «senyor pirotècnic, pot començar la mascletà».

El encendido de la mecha de una traca valenciana ha sido el disparo de salida para una mascletà de corte clásico, con facciones digitales, que ha comenzado con varios golpes de aéreos en varias fases. En los primeros minutos del espectáculo, se han apreciado silbatos, tritonos y roncadoras, además de humo de color en tonos azules, blancos, verdes y amarillos junto a destelllos.

Como toda mascletà, después de los truenos aéreos siempre llega la fase terrestre. Poco a poco, tras un reventón en el cielo, los disparos han ido saliendo del centro de la plaza, donde el pirotécnico ha colocado unas estructuras para alzar los cohetes y evitar el deterioro del césped, y han ido tomando medio círculo de la rotonda. Con el suelo a medio vibrar, se han fusionado las cañas aéreas con petardos que han ido marcando el ritmo 'in crescendo'.

Con los alicantinos pidiendo más, al son del espectáculo de Pedro Luis, el pirotécnico lo ha dado todo con un amplio terremoto en tierra que ha puesto al público a saltar con los brazos en alto. Y, si esto sabía a poco, Sirvent ha culminado el disparo con un triple e intenso golpe aéreo que ha retumbado por todos los rincones del distrito.

Tras un último disparo de truenos aéreos, Pedro Luis Sirvent ha salido airoso de la zona de lanzamiento junto a su equipo de la pirotecnia Hermanos Sirvent. Entre aplausos y saludos de los foguerers y barraquers que se han aglutinado en la zona, el maestro de la pólvora ha acudido hacia la zona de autoridades, donde le esperaban las belleas del foc para agradecerle su último disparo antes del día 20, donde volverá a Luceros para sorprender con un nuevo espectáculo en plenas Hogueras de San Juan.

Visto el espectáculo, el público que permanecía en las ventanas de sus casas y oficinas ha sacado el pañuelo blanco junto a pancartas que mostraban el número 10, la nota que han decidido ponerle al disparo. Asimismo, a pie de calle el sueno ha retumbado, los objetos que permanecían sobre mesas y bancos han comenzado a caer y las lágrimas han saltado entre muchas personas.

Una de ellas es Sonsoles. Con gritos de euforia y dando palmas en lo más alto decía «esto sí», mientras la emoción brotaba de sus ojos. «Impresionante», es como ha calificado el disparo de Pedro Luis Sirvent, igual que ha hecho su marido al manifestar que «ha sido de lo mejorcito».

El ritmo de la pólvora continúa este fin de semana. Tras dos disparos celebrados el pasado viernes -como colofón al acto del pregón en el Muelle 14 del Puerto de Alicante- y esta mañana en la zona de Gran Vía, las mascletàs vuelven este domingo con un espectáculo en el polígono de San Blas a cargo de la pirotecnia Ferrández.

Asimismo, la próxima semana contará con los dos últimos disparos de este ciclo, el sábado 10 en la playa de San Juan y el domingo 11 en la avenida de Loring. Con esto, los alicantinos esperarán hasta el domingo 18 de junio para presenciar el concurso de mascletàs de las Hogueras de San Juan.