PP y Vox estrenan la Oficina de Maternidad de Alicante entre críticas y discrepancias

La Concejalía de Bienestar Social ha aglutinado distintos servicios y personal técnico para poner en marcha la nueva Oficina de Maternidad de Alicante, dedicada a «la atención integral a madres y familias». La inauguración del nuevo espacio, ubicado en la plaza del Carmen, se ha visto envuelta en la polémica durante la mañana de este miércoles.

Ha sido en sus puertas donde una concentración -que ha contado con la participación de los grupos de la izquierda- ha obligado a acordonar los accesos al edificio municipal, vigilados por un amplio despliegue de policías locales y nacionales.

Esta medida de 'seguridad' ha servido también para facilitar el acceso de los ediles del PP y Vox -ambos grupos acordaron la creación de este departamento municipal como condición para aprobar los presupuestos de 2024- a la puesta de largo de la Oficina, que también ha generado discrepancias en su interior.

Ha sido en el acto inaugural donde el jefe de servicio de la Concejalía de Bienestar Social ha remarcado que «llevamos mucho tiempo» realizando las labores que centrarán la nueva Oficina de Maternidad, la cual es un «punto único» que busca «potenciar y favorecer» el apoyo a mujeres situación de embarazo y posparto «evitando la vulnerabilidad y riesgo en ellas y en los menores».

La edil responsable de este área, la popular Begoña León, ha incidido en que el objetivo de esta Oficina de Maternidad consiste en «ofrecer apoyo, esperanza y herramientas para apoyar esta etapa con confianza y seguridad». Para ello se ha concentrado a una decena de técnicos municipales que estaban repartidos por los distintos centros sociales para atender a las mujeres que «quieran seguir voluntariamente con sus embarazos».

Del mismo modo, León ha evitado realizar valoraciones sobre la manifestación que aguardaba a las puertas de la Oficina de Maternidad, pues «estamos en un país libre y cada cual puede reivindicar lo que quiera». En esta línea ha criticado la ausencia de la oposición en el interior del edificio, incidiendo en que con sus reproches «ponen en duda» el trabajo de los funcionarios municipales.

Tras sus palabras, en las que ha remarcado la labor de apoyo y asesoramiento, ha intervenido la portavoz del grupo municipal Vox, Carmen Robledillo, recalcando que antes de esta oficina la mujeres alicantinas «no éramos libres», pues al acudir a los centros se ofrecía «una única opción, la más fácil, que es abortar, quitar al niño de en medio por problemas económicos o sociales».

La edil ha remarcado la presencia de las entidades RedMadre y Provida, ante las que ha recalcado que en la nueva Oficina de Maternidad de Alicante «nadie va a coaccionar porque somos libres y decidimos». En esta línea ha aseverado que «aquí se informa de que el aborto es una salida y también de que hay otras», todas ellas en «apoyo a la maternidad» porque «somos libres y decidimos, y debemos tener las dos opciones».

Las discrepancias han llegado tras ambas intervenciones, cuando Robledillo ha tenido que matizar su acusación para referirse a que los centros en los que se ofrece la opción de interrumpir el embarazo son «clínicas privadas y sanidad pública, como un médico de cabecera». La aclaración ha sido provocada por Begoña León, quien ha defendido que desde la Concejalía «jamás se ha dicho a ninguna mujer que vaya a abortar».

Robledillo también ha cargado contra el alcalde Luis Barcala durante la inauguración de la Oficina de Maternidad, criticando su ausencia. León ha vuelto a intervenir para explicar que el primer edil ha delegado en ella. «Hoy han venido los que pueden estar aquí, no hay simbolismos», en alusión a la presencia de las concejalas del equipo de Gobierno Cristina Cutanda, Lidia López, Mari Carmen de España y Ana Poquet.

Los grupos políticos de la oposición han participado en la concentración que ha aguardado a las puertas de la nueva Oficina de Maternidad de Alicante. Tras la inauguración han manfiestado su rechazo, pues «atenta contra los derechos de las mujeres» y su implantación ha servido para «intentar salvar el presupuesto debido a su falta de apoyos en el pleno», ha denunciado la portavoz del grupo municipal socialista, Ana Barceló.

La edil ha defendido que la responsabilidad en el acompañamiento en un embarazo corresponde a los servicios sanitarios no a un servicio administrativo que con lo que se pretende es «manejar los sentimientos de las mujeres vulnerables hacia donde ellos quieren». También ha cargado contra el alcalde por la oficina «antiaborto», quien «mercadea con los derechos de las mujeres bajo el chantaje de Vox».

Desde Compromís han calificado la Oficina de Maternidad como un «chiringuito» sobre el que el Ayuntamiento «no tiene competencias». Será en los próximos días cuando acudan al Síndic de Greuges para defender «los derechos de las mujeres alicantinas» y también de otros puntos de España, pues «las oficinas se reproducirán», ha resaltado la edil Sara Llobell. «Cuando tengamos un informe veremos las acciones desde España y Europa».

La coordinadora de Esquerra Unida, Lucía Ibáñez, ha tomado la voz en representación de su grupo municipal insistiendo en que la Oficina es «una tomadura de pelo». En este sentido, ha recalcado que las mujeres «necesitamos servicios sociales de calidad, trabajos dignos, conciliación, colegios y escuelas infantiles», y ha critiado al Ayuntamiento por «ceder ante las peticiones de Vox».

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