Las playas de Alicante apuran los últimos días del verano

Si hace dos semanas las redes sociales se inundaron con cartelas y fragmentos de las canciones de Earth, Wind & Fire e Iván Ferreiro, esas que suenan como «Do you remember / The 21st night of September?» o «no te echaré de menos en septiembre, verano muerto veré a las chicas pasar», respectivamente; poco queda para que lo haga Amaral con sus «no quedan días de verano».

Y es que el equinocio de otoño está a la vuelta de la esquina. Apenas queda una semana para cambiar de estación y comenzar la cuenta atrás hacia la temporada de manga larga y café sin hielo. Aunque, eso sí, parece que en Alicante la ciudadanía y los visitantes aún no son conscientes de ello.

Ha sido este sábado cuando la playa del Postiguet se ha vuelto a llenar en pleno ecuador de septiembre. La bandera amarilla no ha sido un impedimento para que los bañistas planten su toalla sobre la arena y se acerquen a la orilla para darse un chapuzón. Más bien todo lo contrario, ha sido la ocasión idónea para aprovechar el sol que ha inundado la ciudad y refrescarse en el mar antes de que el temporal impida hacerlo.

Pocos han sido los valientes que se han atrevido a sumergir la cabeza, pues el arenal ha permanecido cubierto de personas que han aprovechado para disfrutar de la jornada con una conversación, un libro o, simplemente, con una mirada de paz y tranquilidad al Mediterráneo que baña la costa de la ciudad del Benacantil.

También, los alicantinos y visitantes han aprovechado para recorrer el paseo de Gómiz. Con vaqueros, con bermudas, sin camiseta... Han sido muchas las opciones para dar un garbeo por este privilegiado enclave que respira olor a mar. Con ello, las terrazas de los chiringuitos que se alzan sobre las adoquines turquesa han permanecido abarrotadas durante la hora del almuerzo, porque nada mejor que disfrutar de un buen bocado con el sol de cara y el rompeolas de fondo.

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