El corazón del voluntariado en Alicante
Espacio de asociaciones y motor de múltiples iniciativas, el centro de Alicante esconde tras sus puertas todo un universo de solidaridad y participación que llena de vida las calles de la ciudad
Tras la pequeña entrada de la calle Serrano de Alicante, aparece un mundo escondido. En la puerta un grupo de personas con bastones y perros guías charlan animadamente mientras se despiden. En el patio hay un grupo de señoras haciendo yoga. Y más resguardados, en una de las salas, algunos hombres y mujeres asisten a un recital de poesía. Son las 11 de la mañana de un lunes y el Centro de Asociaciones y Voluntariado de Alicante bulle de vida, de actividades y de reuniones.
Este espacio es el corazón de las entidades de la ciudad, un espacio de referencia en pleno centro comercial de Alicante en el que grupos de la ciudad de todo tipo pueden buscar información, asesoramiento o espacios para realizar sus proyectos.
Es el caso de la asociación Espejo de Alicante, una entidad cultural que busca la promoción artística. En ella los casi 600 socios pueden desarrollar sus habilidades en pintura, escultura y otras artes. Ellos son los responsables del recital de poesía que cada lunes se realiza en el Centro de Voluntariado. «Tenemos una oficina compartida en la que cada lunes nuestros asociados pueden venir a realizar gestiones y también nos prestan el salón para algunas actividades», comenta uno de los miembros de la Junta Directiva de esta entidad, Fermín Serrano. Aunque sus exposiciones suelen realizarse en espacios más amplios, el Centro de Voluntariado les ofrece un lugar fijo en el que organizarse.
Para Maria Pilar Ordaz y Raquel Ranedo, beneficiarias de la Fundación Dasyc lo mejor es el patio. Ellas acuden todas las semanas al curso de yoga que realiza esta entidad, que tiene entre sus principios paliar las situaciones de exclusión social con proyectos relacionados con personas mayores, infancia y otros colectivos. «Con la gimnasia nos sentimos mejor, más ágiles, estamos al aire libre y es una maravilla», afirma Raquel.
«Todas estas actividades son a propuesta de las entidades que llenan cada día el centro», explica Alejandro Pérez Belmonte, técnico de la Concejalía de Derechos Públicos y encargado de este espacio. Entre sus funciones está gestionar el Centro y hacer el puzzle que permite encajar a todas las asociaciones. Pero también es quien se encarga de asesorar a las asociaciones en cualquier aspecto que necesiten o dar información a todos aquellos que quieren formar una.
El Centro asesora a las asociaciones sobre cuestiones organizativas y administrativas pero también ayuda a formar nuevas entidades o a encontrar un lugar donde hacer voluntariado
Pero no es el único trabajo que realizan en este centro, también se encargan de difundir las actividades que organizan las entidades del voluntariado y ayudan a las personas que quieren hacer voluntariado a encontrar un lugar en el que puedan desarrollar sus inquietudes. «Miramos sus preferencias y recogemos las necesidades de las asociaciones de voluntariado a través de unas fichas y después guiamos a la persona según sus preferencias», afirma Alejandro Pérez.
También realizan actividades en el Centro de voluntariado de la asociación Retina Comunidad Valenciana. Esta entidad ayuda a personas con enfermedades heredo-degenerativas de la retina ofreciendo un espacio de ocio adaptado. Su trabajadora social, Eva Ortiz, explica que su entidad realiza una intervención psicosocial que mejora la calidad de vida. «Ellos necesitan actividades y un espacio para desarrollarse. El tiempo libre es muy importante y supone un respiro para estas personas. El Centro de Voluntariado nos presta salas y un despacho compartido para poder realizar nuestras actuaciones», insiste.
Alicante cuenta con casi 300 entidades de voluntariado inscritas, un número alto pero que ni siquiera así permite hacerse a la idea de la vida que se concita dentro del Centro de Voluntariado. Un sinfín de oportunidades para que la solidaridad alicantina llegue a todos los rincones de la ciudad.
