Alicante inaugura su primer refugio climático abierto al público en el Museo de Aguas

El Museo de Aguas de Alicante ha presentado este lunes el primer refugio climático abierto al público en la ciudad. El evento ha contado con la participación de Sergio Sánchez, director general de Aguas de Alicante, y Amelia Navarro, directora de Sostenibilidad, Equidad y Acción Social.

Sánchez ha destacado la importancia de esta iniciativa, señalando que «como empresa mixta participada por el Ayuntamiento de Alicante, Aguas de Alicante practica la escucha activa de las necesidades ciudadanas como parte de su acción diaria. Así, ha surgido la posibilidad de aprovechar las especiales características climáticas que se generan dentro de los Pozos de Garrigós, con una temperatura constante a lo largo de todo el año, para poner en marcha esta iniciativa que permite ofrecer al ciudadano de Alicante y a sus visitantes un espacio en el que encontrar esa 'protección durante unas horas' ante circunstancias climáticas adversas, cada vez más frecuentes en la zona mediterránea».

Esta acción se enmarca dentro del Plan Estratégico 2022-2027 de Aguas de Alicante, específicamente en el eje de Lucha Contra el Cambio Climático. La empresa trabaja en múltiples vertientes para combatir la crisis climática, tanto en la gestión del recurso hídrico como en otras áreas indirectamente relacionadas. En este caso, se han aprovechado instalaciones municipales gestionadas por Aguas de Alicante desde hace 15 años, dotándolas de comodidades y adaptando la agenda cultural del museo.

El refugio estará disponible inicialmente en el horario habitual del museo: de martes a viernes de 10 a 14 y de 17 a 20 horas, y sábados y domingos de 10 a 14 horas durante el invierno (de septiembre a mayo). En verano (de junio a agosto), el horario será de martes a viernes de 10 a 14 y de 18 a 21 horas, y sábados y domingos de 10 a 14 horas. Además, se evaluará la posibilidad de ampliar este horario en caso de olas de calor.

Ubicado en el interior de los Pozos de Garrigós, específicamente en el 'Pozo 1' de este sistema de tres aljibes del siglo XIX, el refugio climático responde a una necesidad creciente que aún no tiene regulación estatal, aunque sí recomendaciones en el Plan Nacional de Adaptación al Cambio Climático.

En la Comunidad Valenciana, la Ley de Cambio Climático de 2022 menciona la necesidad de crear una 'Red de Refugios Climáticos', pero no detalla sus características. Iniciativas similares ya están en marcha en ciudades como Barcelona, Valencia y el País Vasco, a las que ahora se suma Alicante. A esta iniciativa se han querido sumar tanto la Concejalía de Cultura del Ayuntamiento de Alicante, como la Universidad de Alicante, a través de su Vicerrectorado de Cultura, que han donado una amplia bibliografía a disposición de todos sus visitantes.

Si bien no pueden ser soluciones únicas, porque no resuelven el problema de la climatología extrema, y deben ir acompañados de otras medidas de adaptación como el aumento de la cobertura verde, entre otras muchas, los refugios climáticos empiezan a desempeñar un papel esencial en nuestras ciudades, densas y urbanizadas. Mientras se avanza en estos otros ámbitos, las redes de refugios son críticas frente a la exposición a las denominadas islas de calor urbanas, ayudando a reducir la exposición y mejorando la capacidad de respuesta en momentos de estrés térmico.

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