Dos detenidos por secuestrar, maniatar y apuñalar 14 veces a su jefe en Elche
Los apresados negaron la agresión y aseguraron a los agentes que la víctima se autolesionó porque padecía una «enfermedad mental»
Maniataron de pies y manos y apuñalaron, presuntamente, hasta en catorce ocasiones a su jefe, de 29 años, en una vivienda unifamiliar de Elche. La víctima ingresó en el Hospital General con dos heridas punzantes en el cuello y una docena de cuchilladas en el abdomen que le provocaron una perforación de intestino delgado e hígado. La Policía Nacional ha detenido a los supuestos agresores, de 28 y 30 años, y continúa con la investigación para esclarecer los hechos.
Los apresados negaron la agresión y aseguraron a los policías que la víctima se había autolesionado porque padecía una «enfermedad mental». La inspección ocular del lugar tumbó la versión de los sospechosos, puesto que los investigadores localizaron evidentes signos de violencia y un cuchillo de grandes dimensiones con la hoja doblada, arma con la que presuntamente se cometió la brutal agresión.
De los hechos se tuvo conocimiento a través de la Policía Local de Elche, quienes dieron cuenta a la Policía Nacional del hallazgo en una vivienda unifamiliar de un varón con lesiones de origen violento. A la llegada de los agentes especialistas del grupo de Delincuencia Violenta de Policía Judicial de la Comisaría de Elche, la víctima ya no se encontraba en el lugar, puesto que al presentar varias heridas inciso-cortantes que aparentemente revestían cierta gravedad, había sido trasladada urgentemente al Hospital General.
Por lo que respecta a la primera atención sanitaria, los facultativos que lo atendieron en el domicilio, manifestaron a los efectivos de Seguridad Ciudadana de la Policía Nacional que la víctima presentaba a primera vista once heridas inciso-cortantes en el abdomen, además de hematomas y eritemas por todo el cuerpo compatibles con una agresión física, así como heridas en tobillos y muñecas, que denotaban que podía haber sido atado de pies y manos.
Versiones contradictorias
Los supuestos agresores, que se encontraban en la vivienda a la llegada de los agentes, relataron que la víctima era su jefe y que vivían juntos desde hacía unos días. También aseguraron que el agredido padecía una «enfermedad mental» y que se había intentado autolesionar. De hecho, detallaron que llegó a pedirles que le atasen para evitar la autolesión.
Sin embargo, las versiones de los sospechosos se contradecían en algunos puntos. Además, la inspección ocular del escenario de los hechos evidenciaba claros signos de violencia o lucha, incluso localizaron restos de cinta americana impregnados en sangre, detallan fuentes policiales.
Por otro lado, los investigadores observaron que la cristalera que daba la terraza había sido fracturada desde dentro violentamente. Los sospechosos lo justificaron explicando que lo habían hecho para salir al exterior a fin de pedir ayuda, puesto que el perjudicado había cerrado con llaves la vivienda y no podían salir.
En cuanto a la supuesta arma con la que asestaron catorce puñaladas a la víctima, la inspección ocular realizada por Policía Científica propició el hallazgo de un cuchillo de grandes dimensiones, cuya hoja incluso se encontraba parcialmente doblada, pudiendo tratarse del arma con el que provocaron las heridas a la víctima.
Con todo, la Policía apresó a los dos sospechosos, acusados de los delitos de detención ilegal y tentativa de homicidio. Los investigadores continúan con las pesquisas para esclarecer los hechos. Por su parte, el agredido, tras un periodo de hospitalización, recibió el alta hospitalaria debido a la evolución favorable de su estado de salud.
