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Jueves, 19 de septiembre 2024, 11:40
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La Policía Nacional ha detenido a una joven de 26 años por un presunto delito de estafa. La mujer se hizo pasar por la pareja del comprador de una vivienda en Alicante aprovechando que este no sabía castellano. Tras actuar como intermediaria entre la inmobiliaria y la víctima, consiguió poner la casa a su nombre.
Cuando el varón, de nacionalidad argelina y que residía fuera de España, se dio cuenta de la estafa amenazó con acudir a la policía, pero la joven aseguró que le denunciaría por violencia de género si este iba a la comisaría, a pesar de que no habían tenido nunca ninguna relación sentimental. Incluso la joven llegó a materializar la amenaza.
Según informa el cuerpo de seguridad en un comunicado, los hechos se remontan a 2023, cuando la joven era inquilina en una vivienda que tenía la víctima en Valencia. Esta se negó a pagarle el alquiler con diversas excusas. El arrendador, que estaba interesado en vender la casa y comprar una en Alicante, le propuso que buscase una vivienda económica en la ciudad para comprarla y le ofreció la posibilidad de que se fuera a vivir a esta nueva casa, desocupando la de Valencia. Para ello llegó incluso a bajarle el precio del alquiler para que pudiese hacer frente al pago.
Tras encontrar un inmueble en Alicante, que fue del agrado del comprador, se inició el contacto con la inmobiliaria. La joven se ofreció a hacer de intermediaria. Ambos se personaron en el establecimiento, siendo la mujer la que llevó el peso de la negociación, asegurando que eran pareja y que la compraban para vivir juntos, algo totalmente falso y que no entendió la víctima por su desconocimiento del idioma.
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Tras regresar de nuevo a la inmobiliaria, ambos formalizaron la reserva, en la que figuraba la joven como titular de la casa. La milimétrica estrategia diseñada por la inquilina fue tomando forma, cuando aprovechó que su casero se marchó nuevamente a su país para personarse otra vez en la inmobiliaria y solicitar las llaves de la vivienda reservada con la excusa de ir haciendo la mudanza.
Sobre mayo de este año la inmobiliaria recibió los 47.000 euros de transferencia por el total de la compraventa, iniciándose los trámites notariales y consiguiendo la joven figurar como única compradora del inmueble en la escritura.
La víctima amenazó con denunciar los hechos en la policía en cuanto se dio cuenta de lo que sucedió. La joven le replicó que, en caso de denunciarle, acudiría a la comisaría a contar que había sido víctima de violencia de género, asegurándole que este tipo de delito estaban muy penados en España.
Finalmente, la víctima decidió denunciar los hechos, haciéndose cargo de las investigaciones los agentes de Policía Judicial de la Comisaría Provincial de Alicante, quienes consiguieron esclarecer los hechos y detener a la investigada, como presunta autora de los delitos de estafa y coacciones, quien ya tenía antecedentes relacionados con hechos de similares características incluso alguno de ellos relacionado con la usurpación de bienes inmuebles.
Tras la detención de la presunta autora de los hechos, una mujer de nacionalidad argelina y de 26 años de edad, todo lo actuado fue puesto a disposición de los juzgados de instrucción de la misma localidad donde fue arrestada.
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