Los ángeles de la guarda también llevan uniforme en Alicante
Agentes de la Policía Nacional consiguen encontrar un techo donde dormir a una familia de origen ucraniano
Son principios de abril y las dos de la madrugada en la playa del Postiguet de Alicante cuando dos policías nacionales que patrullaban por el paseo observaron desde el vehículo un carrito de bebé en la arena, lo que les extrañó y por eso decidieron parar y averiguar que estaba pasando.
Lo que no podían imaginarse ese 9 de abril es que el carricoche no solo estaba ocupado por un niño de 3 años, ni no que junto a él también se encontraba su hermano de 7 años y los padres de estos, todos ellos de origen ucraniano. Los cuatro trataban de dormir, siendo algo difícil puesto que temblaban de frío.
Fue entonces cuando los dos agentes se despojaron de sus chaquetas operativas y se las pusieron a los menores para que dejaran de temblar, entrevistándose con los padres quienes manifestaban que no tenían dinero por lo que no habían podido conseguir un techo donde dormir.
Desde ese momento, los agentes se ponen en contacto con la Sala 091- CIMACC (Centros Inteligentes de Mando, Comunicación y Control) informando de lo sucedido y manifestando buscar una solución.
Buscando un hogar
Pero estos agentes, convertidos ya en ángeles de la guarda para la familia, van más allá e incluso manifiestan al CIMACC que no piensan dejar a esta familia durmiendo en la calle, que en caso de ser necesario pagarán ellos mismos un alojamiento para que el matrimonio y sus hijos puedan pasar la noche a cubierto.
Este extremo no fue finalmente necesario ya que mediante la sala del CIMACC se consigue una alternativa en una pensión alicantina para que esta familia necesitada pueda dormir unos días hasta que encuentre otra solución.