Amanda Rubio Martínez: «Ofrendar a la patrona del brazo de mi padre es un sueño hecho realidad»

Amanda Rubio Martínez vive las fiestas de Alicante con fervor y con distintas caras. Toda su vida ha sido barraquer en Festa i vi hasta que en 2017 decidió vivir las Hogueras de Alicante desde dentro, en Rabasa Polígono Industrial. También forma parte de la Semana Santa de Alicante dentro de la hermandad de la Virgen de la Alegría junto a su padre, él costalero y ella como dama de mantilla.

Esta vinculación a la Fiesta, que le llega por herencia familiar, hace que esta alicantina defina les Fogueres de Sant Joan como «el sentimiento que compartimos quienes las vivimos». Durante los días grandes, «Alicante se convierte en un latido único», el de una ciudad que «late al mismo compás: el de la ilusión, la tradición y el orgullo».

Como el que vivió el pasado ejercicio durante su reinado como bellea de Rabasa Polígono Industrial. La emoción llegó, sobre todo, durante el desfile a la patrona. «Era un momento que llevaba años soñando y que gracias a mi comisión se hizo realidad, ofrendar del brazo de mi padre», confiesa. «Es un honor vivir estos momentos tan especiales junto a él».

Tras estos recuerdos que permanecen tanto en su mente como su en corazón, Amanda Rubio Martínez emprende la carrera como candidata a bellea del foc de Alicante 2025 otro cargo que suma a una amplia colección, tanto en representación como en gestión: dama d'honor y bellea, y delegada artística de su comisión.

De su reinado también resalta la nit de la cremà y la elección de su ninot. «No había muchos pequeños que pudiéramos llevarnos a casa» y se decidió por uno que le llamó la atención, «una figura de bellea con el escudo de nuestra foguera pintado en el delantal, era mi favorito», al que bautizaron como 'Paquita'.

Tanto ella como sus padres fueron conscientes de que «el tamaño no era precisamente pequeño», aunque en comparación con los demás ninots pudiera parecerlo. «Al llegar a casa no pasa más que de la entrada», pero aún así encontraron la solución: «Colocamos a 'Paquita' en el escaparate de la peluquería de mi tío y mantiene vivo el espíritu foguerer durante todo el año».