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Hay Rubén Torrecilla para largo en el Hércules. Al menos, contractualmente hablando. El técnico extremeño ha ampliado su vínculo con el club blanquiazul hasta 2026 tras ascender a Primera RFEF como campeón. Torrecilla tenía otra temporada más firmada, pero una cláusula de su contrato le ... daba otra campaña más si lograba subir, algo que ha logrado por la vía rápida, sin tener que pasar por la promoción.
El secretario técnico Paco Peña ha repetido en numerosas ocasiones, también cuando la continuidad del entrenador estaba en el aire, que Torrecilla era la piedra angular del proyecto, por lo que su ampliación de contrato se ve como un proceso natural que debe dotar de estabilidad al vestuario.
Con el paso de los meses, la espantada de Lolo Escobar en pleno verano se ve en el club como una bendición. El técnico del curso pasado siguió a regañadientes mientras su representante le buscaba equipo y, en cuanto le llamó al Algeciras, se marchó a toda prisa. Peña reaccionó rápido y convenció a un Torrecilla que no tenía entre sus planes dirigir en Segunda RFEF, ya que su caché era de una categoría superior tras ser despedido en el Castellón cuando estaba en puestos de ascenso a la categoría de plata.
Pero la historia blanquiazul y la ambición del proyecto pesó y Torrecilla dijo que sí a las pocas horas de recibir la llamada. El hambre del técnico extremeño y su convencimiento de que salir del pozo era posible calaron desde el principio en un vestuario confeccionado con futbolistas jóvenes, humildes y con ganas de llegar algún día al fútbol profesional. El técnico extremeño no quería ningún veterano ya de vuelta y por eso le comunicó el primer día a Míchel que no tendría oportunidades.
Los únicos jugadores con experiencia que llegaron en verano fueron el central Josema (32 años) y el centrocampista De la Nava (31), ya que ambos mostraron un convencimiento inicial y unas ganas tremendas de hacer historia con el Hércules.
Ahora Torrecilla tiene galones en las oficinas del Rico Pérez y diseñará junto a Peña la plantilla del curso que viene en Primera RFEF. Desde el club se pretende mantener la columna vertebral, pero todo dependerá de lo que ofrezca el mercado, ya que la nueva categoría es dura y se necesitan futbolistas que marquen diferencias para no pasar apuros, teniendo en cuenta que descienden cinco equipos a Segunda RFEF y el Hércules quiere evitar eso a toda costa.
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