Simulacro en la UA: los estudiantes se preparan para hacer frente a catástrofes naturales
El test tendrá lugar entre las 9 y las 17 horas y forma parte del nuevo Protocolo de Fenómenos Extremos
La fatídica DANA del 29 de octubre ha evidenciado la importancia de conocer los protocolos para afrontar una catástrofe climática. Esa es la premisa del simulacro convocado por la Universidad de Alicante para este martes en su campus de Sant Vicent del Raspeig. La institución ha creado un nuevo Protocolo de Fenómenos Naturales Extremos, y la prueba de mañana será su primer test de funcionamiento. Se desarrollará entre las 9:00 y las 17:00 horas.
El objetivo del simulacro es evaluar tanto el funcionamiento de la línea de coordinación y emisión de comunicaciones previstas en el protocolo, como las herramientas desarrolladas para responder ante cualquier tipo de fenómeno natural extremo que pueda producirse en su área de influencia.
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El nuevo protocolo contempla la realización periódica de este tipo de simulacros. Tal y como explica el vicerrector de Infraestructuras, Sostenibilidad y Seguridad Laboral, Salvador Ivorra: «Queremos familiarizar a la comunidad universitaria con las indicaciones que debe seguir ante este tipo de situaciones, y mantener actualizadas las herramientas informáticas para favorecer y agilizar la efectividad de las medidas adoptadas y del proceso de comunicación».
Al respecto, y dado que se trata de un simulacro, se advierte que ningún miembro de la comunidad universitaria deberá seguir las consignas recibidas durante su realización.
Como parte de este mismo protocolo, la UA puso en marcha la semana pasada un semáforo informativo visible tanto en la página principal como en el resto de secciones web con acceso principal a la universidad. Este semáforo está programado para cambiar de color (verde para la normalidad; amarillo, naranja y rojo, en función de los avisos) con una previsión a tres días (un círculo informativo por día), según el tipo y nivel de aviso de fenómeno meteorológico en la provincia de Alicante, siempre con datos obtenidos de la AEMET.
A través de un enlace, el semáforo da acceso a toda la información adicional relacionada con el nivel de aviso, incluyendo las medidas preventivas y de actuación específicas previstas según los niveles de riesgo.
Aviso a navegantes
Durante el simulacro de emergencia, la información que ofrezca el semáforo también será simulada. Por lo tanto, los tipos y niveles de aviso mostrados no se corresponderán con la situación real del momento, motivo por el cual Ivorra insiste en que «los mensajes y comunicaciones emitidas durante su realización no deberán ser atendidos».
Una vez finalizado el simulacro, el semáforo dejará de mostrar información simulada y volverá a ofrecer, de forma permanente, los datos en tiempo real.
Cuando finalice el simulacro, se analizará los resultados implementar posibles mejoras antes del inicio del próximo curso
Cuando finalice el simulacro, el Comité de Emergencias analizará los resultados con el fin de continuar con las gestiones necesarias para aprobar e implementar el protocolo antes del inicio del próximo curso 2025-2026.
En fase de análisis
El protocolo, que todavía se encuentra en fase de análisis, deberá ser aprobado —previo estudio por el Comité de Seguridad y Salud de la UA— por el Consejo de Gobierno de la universidad. El documento ha sido elaborado por un grupo de trabajo formado por expertos en climatología, medio ambiente y catástrofes naturales, así como técnicos superiores en informática, comunicación y prevención de riesgos.
La gestión del simulacro corresponde al Comité de Emergencias de la UA, encabezado por la rectora y compuesto, además, por los vicerrectores con competencias en Seguridad Laboral y Estudiantes, y el gerente. También forman parte del comité la Unidad de Comunicación, el Servicio de Prevención y un investigador o investigadora con reconocida trayectoria en el campo de la climatología y los fenómenos naturales.
El protocolo contempla un completo plan de comunicación, que incluye las distintas fases de la emergencia, los canales, los tipos de mensaje para cada situación y el personal implicado en su ejecución.
Desde la UA destacan que todas las herramientas informáticas diseñadas para poner en práctica este protocolo han sido desarrolladas por el Servicio de Informática de la universidad. En total, se han diseñado cinco aplicaciones que automatizan diversas partes del proceso, especialmente en lo relativo a la detección de alertas y la gestión de comunicaciones.
