Superbautizo de Mbappé en Varsovia

En diciembre de 2012, un emergente talento que respondía al nombre de Kylian pisaba por primera vez la Ciudad Deportiva de Valdebebas. Lo hacía, en vísperas de su 14 cumpleaños, tras invitación del Real Madrid a iniciativa de Zinedine Zidane.

En aquella semana, tuvo tiempo de visitar las instalaciones, acudir al Santiago Bernabéu, conocer a su ídolo Cristiano Ronaldo, ejercitarse durante cuatro días junto a otras promesas del club y disputar incluso un partidillo entre el Cadete B y el Cadete A en el que compartió escenario, entre otros, con Achraf Hakimi. Casi doce años después de aquel episodio y ya con su apellido acompañando al dorsal '9' que un día luciese el espejo futbolístico en el que se miraba, Mbappé tendrá al fin el esperadísimo bautismo de fuego con el equipo de sus amores este miércoles por la noche en Varsovia (21:00 h.).

El estreno del prodigio de Bondy con la elástica blanca acapara los focos en el encuentro que abre la temporada 2024-25. Un curso que podría ser histórico para el Real Madrid, aspirante a siete títulos, lo nunca visto. Por si no bastase con su puesta de largo, mantener vivo el sueño del septete suma otro aliciente a la Supercopa de Europa.

Un torneo tradicionalmente considerado menor, pero que sirve para sacar pecho al medir al Real Madrid, rey de Europa, con el debutante Atanta, que abrochó en mayo en Dublín su primer título europeo. Aquella Europa League parecía destinada al Bayer Leverkusen hasta que el belga Lookman destrozó a los hombres de Xabi Alonso con un 'hat-trick'.

La rendición del equipo de la aspirina ante la vertiginosa propuesta futbolística del cuadro bergamasco pone sobre aviso al Madrid de cara a un pleito en el que el club de Chamartín aspira a levantar su sexta Supercopa de Europa. Rompería así el empate que mantiene con Barça y Milan en la cima de un torneo que unos entienden como el prólogo de la campaña naciente y otros consideran el epílogo de la anterior.

A esta última corriente se adscribe Carlo Ancelotti. «Hay que tener en cuenta los que ganaron la Champions; es en realidad una continuación de la temporada pasada», decía antes de viajar hace un par de años a Helsinki, donde un Real Madrid que venía de alzar la Decimocuarta superó al Eintracht con goles de Alaba y Benzema. Entonces, y fiel a su premisa, el transalpino calcó el once que había dispuesto en París para batir al Liverpool. «La Supercopa la tienen que jugar los que han ganado la Champions», reiteraba hace una semana antes de introducir él mismo un matiz. «Pero faltan dos, Kroos y Nacho». Ese inciso abre las puertas del once a Mbappé de par en par.

Aunque lleve solo una semana de trabajo con el grupo -como otra media docena de internacionales merengues por la Eurocopa-, el francés apunta a ser el mascarón de proa del Madrid en Varsovia. Así lo exige su condición de futbolista más rutilante del planeta, el fervor con el que la hinchada merengue ha acogido su llegada y la tenacidad con la que peleó el fichaje Florentino Pérez, ávido de ver en acción a su nuevo diamante. Ancelotti satisfará al jefe, tras comprobar que Mbappé ha llegado como un toro.

Con Militao cubriendo la vacante en el eje de la zaga que dejó Nacho y Mbappé entrando en el once por el retirado Kroos, la alineación del Real Madrid no tiene incógnitas aparentes. Así, Valverde y Bellingham estarán acompañados en el centro del campo por Tchouaméni. El francés será titular finalmente tras lesionarse en una acción fortuita -en el último entrenamiento previo al partido- su compatriota Camavinga, quien sufre un esguince en su rodilla izquierda cuyo tiempo de recuperación se valorará en los próximos días por los servicios médicos del club tras hacerle nuevas pruebas aunque se cree, a priori, que podría rondar un mes de baja.

Esa abundancia contrasta con la escasez del técnico italiano Gian Piero Gasperini. A la rebelión del neerlandés Teun Koopmeiners, clave para que el Atalanta (apodada La Dea) ganase la Europa League y vuelva a competir en la Champions pero que está forzando su salida a la Juventus, se suman las lesiones de Scamacca y Scalvini por rotura del ligamento cruzado anterior de la rodilla, así como las de Toloi y Zaniolo.

La gran novedad respecto al equipo que amarró su primer título continental es el delantero Mateo Retegui, por el que el Atalanta pagó 22 millones tras la grave lesión de Scamacca. A su pegada y la de Lookman se aferra un equipo cómodo con el rol de tapado que presenta en Varsovia.

Real Madrid: Courtois, Carvajal, Militao, Rüdiger, Mendy, Valverde, Tchouaméni, Bellingham, Rodrygo, Mbappé y Vinicius.

Atalanta: Musso, Djimsiti, Hien, Kolasinac, Zappacosta, Éderson, De Roon, Ruggeri, De Ketelaere, Retegui y Lookman.

Árbitro: Sandro Schärer (Suiza).

Hora: 21:00 h.

Estadio: Nacional de Varsovia.

TV: Movistar Plus+.

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