Brutal encontronazo político en Benidorm tras quedar desierta la licitación de la estación de autobuses
El portavoz de Ciudadanos califica la situación como «uno de los casos más bochornosos de corrupción urbanística» de la ciudad
El proceso de licitación del contrato de la estación de autobuses de Benidorm ha quedado desierto y, por lo tanto, seguirá siendo el muy controvertido Enrique Ortiz el que, al menos de forma temporal, seguirá haciéndose cargo de una instalación que, durante su dirección, ha caído en el más absoluto de los abandonos y presenta, en buena parte de sus estancias, un estado auténticamente ruinoso.
Esta situación, que se aprobará definitivamente el próximo lunes cuando el pleno municipal vote la declaración del concurso como desierto, ha provocado un choque de trenes de dimensiones extraordinarias entre el gobierno local y la oposición, especialmente con Ciudadanos y su portavoz, Juan Balastegui, que ha cargado con gran dureza contra el alcalde, Toni Pérez, y su equipo.
Así, Balastegui no ha dudado en calificar lo sucedido como «la culminación de uno de los casos más bochornosos de corrupción urbanística de Benidorm» y ha asegurado que lo sucedido este viernes es «la culminación de la operación para dejar en manos de Ortiz la explotación de la Estación de Autobuses de Benidorm».
El máximo responsable del partido naranja en la capital turística de la Comunitat Valenciana, ha recordado que cuando hace un mes se hiciera público el pliego de condiciones mediante el que se licitaba este contrato, ya reprochó al PP «las condiciones nefastas aprobadas» para ello y que vaticinó que estaba diseñado «para que siguiera en manos de Ortiz».
Tras hacer memoria, ha asegurado que ahora «aquel anuncio es un hecho». En concreto, Balastegui ha asegurado que «tal y como advertí, las condiciones de la licitación hacían inviable que otro empresario se presentara y el complejo seguirá en manos del empresario afín al PP, que además se beneficiará casi dos años más del hotel, tras un nefasto convenio firmado por Toni Pérez».
El portavoz de Ciudadanos ha apuntado directamente al alcalde de Benidorm, Toni Pérez, al asegurar que fue él «quien estableció la última palabra de los términos del acuerdo con Ortiz, lo que ató de pies y manos a los técnicos para establecer unas condiciones normales en la licitación».
Por ello, siempre según Juan Balastegui, «sacaron a concurso el complejo urbanístico eliminando la posibilidad al nuevo empresario de poder beneficiarse, desde el primer momento, con la explotación del hotel de la estación, que es el único negocio rentable que hay en estos momentos».
Una vez más, desde Ciudadanos han recordado que el proyecto de la estación de autobuses «apenas debía ceñirse a la estación, un parking, 500 metros cuadrados para cafetería y oficinas, y un pequeño hostal de seis habitaciones para conductores».
Sin embargo, ha afirmado el partido naranja, «el PP, con Toni Pérez en sus filas, le concedió a Ortiz la construcción, pese a no ganar el concurso público que se realizó para ello, y luego hizo como que no veía cómo Ortiz construyó lo que le dio la gana, que fue un hotel con 133 habitaciones, una zona comercial de 12.000 metros cuadrados, dos parkings y la estación de autobuses». Además, critican que «lejos de sancionar esa ilegalidad, han dejado que el complejo siguiera en manos de Ortiz, que alquiló el hotel por 40 años, dejando el resto de la construcción en unas condiciones lamentables. Ahora sabemos que seguirá otros 27 años en la misma situación».
El PP tilda de cobarde la actitud de Balasgtegui
Tras estas duras acusaciones, la encargada de dar la réplica por parte del gobierno local ha sido su portavoz y edil de Urbanismo, Lourdes Caselles, que ha asegurado que «por parte del señor Balastegui, no se aportó ningún cambio, sugerencia ni alegación a los pliegos» aprobados para licitar la estación de autobuses.
En ese mismo sentido, Caselles ha criticado que Balastegui «se esperó al pleno para decir que no estaba de acuerdo, pero tampoco aportó absolutamente nada». En un cruce de declaraciones de altísima temperatura, la portavoz del gobierno local, refiriéndose a su homólogo en Ciudadanos, agregó que «desde la cobardía no votó a favor de esos pliegos que habían sido trabajados por parte de los técnicos municipales, pliegos totalmente técnicos porque en este expediente los políticos nunca hemos actuado ni sido parte».
La concejala de Urbanismo benidormense recordaba, así mismo, que sste proceso «se inició para cumplir con una sentencia del año 2012 del Tribunal Supremo y que obligaba al Ayuntamiento a licitar de nuevo la estación y todas sus instalaciones».