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Streamming, shooter, AIM, ILG, coach... son algunas de las palabras que suenan en la plaza de toros de Alicante, reconvertida en un auditorio para ver el ATF Battle Arena, una competición de Valorant que ha enfrentado a ocho equipos de este famoso videojuego en el Circuito Tormenta.
Y es que aunque no lo parezca, el Valorant es uno de esos juegos de PC que 'lo están petando' entre los más jóvenes -y también entre los que no lo son tanto-. Su éxito es tal que mueve millones de euros entre los mejores jugadores internacionales.
«En primera división española se puede cobrar para vivir perfectamente, pero si estás entre los mejores del mundo se pueden cobrar millones, depende del equipo y de los patrocinadores», afirma Faska, entrenador de MIV gaming, uno de los equipos líderes de esta clasificación y que ha venido a Alicante a competir.
Este grupo lo componen seis jóvenes, procedentes de Murcia, Marbella, Barcelona y La Rioja. Y es que aunque sean amateurs, los equipos de este torneo no son todos locales; han venido a Alicante a competir, y muchos tienen componentes de diferentes ciudades. Esta es una de las claves de los e-games, que permiten un tablero de juego mundial donde se puede competir con equipos de todo el mundo.
A nivel amateur, la liga de Valorant del circuito Tormenta cuenta este año con hasta 209 equipos que compiten en diferentes torneos y encuentros. En el caso de la competición disputada estos días en Alicante, esta no cuenta puntos para la clasificatoria de este año, sin embargo, sí que ha repartido más de 2000 euros en premios: 1000 para el primero, 500 para el segundo y 250 para el tercero.
coach del equipo 1 live
Los puntos son especialmente importantes en estos torneos, ya que marcan la clasificatoria y las oportunidades de un equipo o un jugador para pasar a la liga profesional o semiprofesional.
«Se requiere mucha constancia, así vas ganando experiencia poco a poco y esto hace que los equipos de más arriba se fijen y puedan ficharte. Es un mercado, como el de fútbol», comenta el coach del 1 live, que va 12º en esta liga de jugadores amateurs.
Y es que el Valorant ha atraído en sus dos años de vida a gran cantidad de jugadores y seguidores por su capacidad de entretenimiento. Este shooter -un género de videojuego en el que los jugadores intentan matar a los enemigos con armas- de 5 contra 5 ha congregado a numerosos jugadores y comentaristas esta semana en Alicante.
«Se entrena individualmente una parte y por otro lado el rendimiento del equipo; que haya comunicación, buen ambiente, y esto de venir a los eventos genera confianza y amistad con el compañero» comenta el entrenador. Porque igual que los futbolistas, los jugadores dedican horas y horas a los entrenamientos para subir en la clasificación de Valorant. Tiempo individual para crecer como jugador, practicando agilidad y rapidez lo que se conoce como AIM.
Pero además, se requiere una gran cohesión; un esfuerzo colectivo para trabajar en común para entenderse en el juego, mucha coordinación y capacidad para aceptar que «uno puede tener un mal día o mala suerte, y ese día se pierde», dice Faska. Por eso es imprescindible la figura del IGL, el líder de equipo que marca las estrategias y los caminos a seguir que el entrenador ha marcado.
Esta competición ha congregado a medio centenar de jóvenes en la plaza de Toros para disfrutar de la final del torneo. Curiosos y aficionados de Alicante que se acercan a ver jugar a otros, como si de un partido de futbol se tratara.
Sobre el escenario, los dos equipos, pero también dos jóvenes comentadores -«casters»- que son los encargados de describir las jugadas para el público, explicando estrategias y posibilidades de rondas que apenas duran unos minutos y que hacen que el espectador, aunque sea lego en la materia, se quede hipnotizado con la acción que ocurre en la pantalla.
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