Un pueblo de la provincia elegido por un fugitivo holandés para huir de la justicia

Una pequeña localidad de Alicante servía de refugio para un fugitivo holandés sobre el que pesaba una orden europea de detención para extradición (OEDE) dictada por las autoridades de Holanda. Agentes de la Policía Nacional han detenido a un varón, de 70 años de edad, buscado por delitos de tráfico de drogas, organización criminal y blanqueo de capitales, hechos cometidos entre los años 2004 y 2010.

El país reclamante dictó una orden europea de detención que fue puesta en conocimiento de la Policía Nacional tras tener sospechas de que el fugitivo podría haber elegido la provincia de Alicante para esconderse de la justicia de su país.

Por este motivo, los investigadores iniciaron las pesquisas de averiguación no tardando en localizarlo en Altea y tras realizar un dispositivo policial fue detenido.

El fugitivo había huido de la justicia de Holanda tras ser condenado a una pena de dos años de privación de libertad, por delitos de pertenencia a organización criminal, tenencia ilegal de armas de fuego, tráfico ilícito de estupefacientes y sustancias psicotrópicas y blanqueo de capitales.

El detenido, que cometió los hechos entre los años 2004 y 2010, era el líder de una organización criminal procedente de Países Bajos dedicada al aprovisionamiento, venta y transporte de sustancias estupefacientes así como al blanqueo de dinero obtenido mediante actividades delictivas.

Gracias al intercambio de información y la eficacia de la coordinación entre autoridades policiales de otros países y Policía Nacional se pudo llevar a cabo la detención de esta persona.

El detenido, fue puesto a disposición del Juzgado Central de Instrucción de la Audiencia Nacional, órgano encargado de realizar los trámites para su posterior extradición.

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