La Guardia Civil atribuye un delito de incendio forestal por imprudencia grave a los dos investigados por el fuego de Benasau
Al parecer las llamas se iniciaron por una chispa mientras los operarios hacían uso de una radial
La Guardia Civil continúa investigando el origen y causas del terrible incendio de Benasau que ha calcinado 270 hectáreas en un perímetro de 25 kilómetros durante los últimos días. El fuego, ya estabilizado, se inició en la pedanía de Ares del Bosque, en el municipio alicantino, el pasado 30 de julio hacia las 15:00 horas.
El Equipo de Investigación del Servicio de Protección de la Naturaleza (Seprona) de Alicante se centró ayer, jueves 1 de agosto, en dilucidar la responsabilidad de dos hombres, de 37 y 60 años, empleados de una empresa que estaba realizando unas obras en el lugar.
A estos dos operarios se les atribuye un delito de incendio forestal por imprudencia grave, iniciado por accidente, al parecer mientras hacían uso de una radial, según ha dado a conocer la Benemérita. Una chispa de esta herramienta que utilizaban en los trabajos de construcción de una depuradora en la zona parece haber sido la causante de esta desgracia que obligó a desalojar a 150 personas de sus casas en Penáguila.
En este momento, los agentes del Seprona, que todavía se encuentran investigando los hechos, continúan con la instrucción de las diligencias, que serán puestas a disposición de los Juzgados de Alcoy.
El fuego ya está estabilizado
El incendio forestal declarado el pasado martes en Benasau ya se encuentra estabilizado. Así lo ha confirmado este jueves a las 18.40 horas el Consorcio Provincial de Bomberos de Alicante, informando también que todas las carreteras cortadas por el incendio ya han sido reabiertas, y que los efectivos de la UME se han retirado del operativo de extinción del fuego.
La noticia llega horas después de que los desalojados de Penáguila hayan sido autorizados a volver a sus casas, a partir de las 11 horas de este jueves. El avance favorable de los trabajos de extinción ha permitido regresar a sus hogares a las más de 150 personas que el pasado martes tuvieron que abandonar los mismos. El último balance del alcance de las llamas es de 270 hectáreas afectadas dentro de un perímetro de 25 km.
A lo largo del incendio han trabajado 330 efectivos, repartidos en 70 medios terrestres y 12 aéreos. De todos ellos, 200 son del Consorcio de Bomberos de Alicante y del Servicio de Bomberos Forestales de la Generalitat Valenciana, y 130 de la UME.