«¿Cuándo llegará la jornada de 35 horas para los sanitarios de Alicante?»
Los profesionales denuncian el «incumplimiento» de la reducción de jornada prometida por Sanidad, medida que consideran «imprescindible» para asegurar la calidad asistencial
Se trata de una de las principales reivindicaciones evidenciadas por los sanitarios alicantinos en los últimos años. La reducción de la jornada semanal a 35 horas semanales ha quedado en el limbo, a pesar de que era un compromiso explícito del actual equipo de gobierno valenciano.
Así lo recuerda el Foro de Médicos de Atención Primaria de la Comunitat Valenciana (FOMAP-CV), cuyos integrantes muestran su «intranquilidad y rechazo» ante lo que consideran un «incumplimiento» por parte del conseller de Sanidad, Marciano Gómez.
«La promesa se ha convertido en un asunto silenciado que ha desaparecido de las agendas políticas« aseveran los facultativos, que ven una »falta de rumbo y mensajes contradictorios« en la política sanitaria del Consell.
Una medida «viable»
Desde FOMAP-CV recuerdan que esta medida ya está consolidada en la mayoría de comunidades autónomas, donde ha demostrado ser «viable y beneficiosa» tanto para los profesionales como para la calidad asistencial. Su no aplicación en la Comunitat Valenciana, afirman, genera «desigualdad, desmotivación y fuga de talento, además de una creciente sobrecarga laboral».
Consideran que la Atención Primaria sufre desde hace años «una gran presión asistencial y déficit de personal». Ante esa situación, creen que la reducción de jornada «mejoraría la seguridad del paciente, facilitaría la conciliación familiar, disminuiría el riesgo de burnout y favorecería la docencia e investigación, garantizando la formación de nuevos médicos». Asimismo, «fortalecería la estabilidad de los equipos y haría más atractiva la profesión en la Comunitat».
El Foro exige, además, reforzar los recursos médicos, garantizar uniformidad en los derechos laborales y establecer indicadores de calidad y seguridad ligados a la nueva jornada, con evaluación semestral. También piden planes de contingencia que aseguren la cobertura asistencial y una comunicación transparente con los profesionales, junto al reconocimiento a su labor.