El apagón obliga a desprogramar citas en hospitales de Alicante y provoca incidencias en servicios de radiología

Los hospitales y centros de salud de la provincia de Alicante salieron relativamente indemnes del apagón masivo que ha sufrido este lunes toda la península. Los grupos electrógenos con los que cuentan estas infraestructuras permitieron su autoabastecimiento energético, con lo que consiguieron mantener su actividad esencial. Así lo reportaban desde la Conselleria de Sanidad pocas horas después de que se produjera el apagón masivo. 

Sanidad reconoce que los sistemas de comunicaciones están funcionando este martes con fluctuaciones en los distintos departamentos de salud, todo ello debido a los problemas de telefonía e internet que continúa habiendo en la red en general.

Los generadores de los centros sanitarios se mantienen con el gasóleo necesario para afrontar posibles nuevas incidencias. Además, se han activado sistemas de contingencia en aquellas oficinas de farmacia donde se han detectado incidencias en sus sistemas informáticos.

Esa «normalidad» que indicaban este pasado lunes fuentes de Conselleria no impidió que ayer se registraran incidencias en los servicios de radiología, los cuales se están volviendo a dar puntualmente este martes. Otra de las consecuencias generadas por el apagón fue la suspensión de la actividad quirúrgica prevista para la tarde del lunes. Además, 241 pacientes de oxigenoterapia fueron atendidos en los hospitales y puntos de atención continuada, y dos con pluripatología tuvieron que ser ingresados. Por su parte, la actividad con los pacientes de hemodiálisis se realizó sin incidencias.

En hospitales como el de Sant Joan d'Alacant, las fuentes consultadas indican que la actividad en las urgencias se mantuvo con «total normalidad» gracias al funcionamiento de los grupos electrógenos, aunque se han registrados fallos en equipamientos no sanitario como impresoras o sistemas de llamada. 

Otras fuentes del mismo centro aseguran que la gerencia se reunió de urgencia, y se decidió apagar todos los aparatos que consumían exceso de energía, como el TAC y el equipamiento de resonancia magnética. También se apagaron las luces de las zonas no esenciales para que el grupo electrógeno siguiera funcionando con energía suficiente para dar cobertura a los servicios de UCI, Urgencias, quirófano y UCI neonatal.

Las cirugías que se estaban realizando en el momento del apagón se pudieron culminar, pero las que estaban programadas para el resto del día fueron suspendidas. Además, se redobló el personal de supervisión en el área de Urgencias. 

Otros hospitales alicantinos como el del Vinalopó de Elche también reportan «total normalidad» durante la jornada de este lunes gracias al trabajo de sus grupos electrógenos. Apuntan fuentes del hospital que el centro cuenta con hasta cuatro grupos electrógenos cuyos depósitos se podían ir rellenando de combustible en caso de necesidad. Los centros de salud alicantinos también consiguieron mantener su actividad habitual gracias a sus equipos autogeneradores de energía. 

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