Las elecciones catalanas alargan la agonía inversora de Alicante
La ministra Montero confirma que las cuentas del Estado se prorrogan, lo que condena de nuevo a la provincia como farolillo rojo
Nunca unas elecciones catalanas habían salido tan caras a la provincia de Alicante. El adelanto de la cita con las urnas que ayer anunció el president Pere Aragonès ha provocado que la ministra de Hacienda María Jesús Montero confirmara en menos de 24 horas que las negociaciones del presupuesto del Gobierno para 2024 se finiquitan y que se pasa a negociar el de 2025.
La principal consecuencia de esta decisión para la provincia de Alicante es que, durante un año más, estará a la cola de las inversiones en nuestro país. La medida es una noticia extremadamente negativa para un territorio que ya ha soportado una doble infrafinanciación desde hace tiempo.
Ser la 52 de 52 en inversiones tiene una cifra: 106 millones. Aunque el Gobierno central y, especialmente desde la Delegación del Gobierno, se trabajó por borrar esa sensación de 'farolillo rojo', lo cierto es que las cuentas prorrogadas replican números.
La decisión dibuja ahora un complicado panorama para la provincia, pues junto a la escasa inyección de recursos para inversiones, hay que sumar la lentitud con la que se están ejecutando algunas infraestructuras. Este aspecto lo han denunciado reiteradamente el empresariado desde distintas organizaciones.
En noviembre de 2022, la CEV, Ineca y la Cámara de Comercio analizaron los Presupuestos Generales del Estado y coincidieron en señalar que había «llegado el momento de exigir una respuesta definitiva». Nacho Amirola subrayó que «las inversiones presupuestadas en los PGE para la provincia de Alicante se han ido reduciendo desde los 579,3 millones de euros del 2008 a únicamente 160,8 millones de euros que hay previstos para el 2023, algo que cambiaría ligeramente con los 51 millones adicionales«, cosa que no fue.
Mal arranque para Morant
El otro terremoto que está por llegar es el político. El anuncio se produce a puertas de que una ministra del gobierno de Pedro Sánchez, Diana Morant, sea proclamada nueva secretaria general del PSPV-PSOE. Sin duda, es una mala noticia para la titular de Ciencia e Innovación que este jueves vive una jornada de celebración de los premios nacional de Investigación en Gandia junto a los Reyes de España.
La otra consecuencia, que está por ver, en qué posición quedan las posibles negociaciones para la financiación autonómica, donde la Comunitat Valenciana adolece de la necesaria para abordar servicios básicos, como se ha demostrado por activa y pasiva.
Se abre, pues, la ventana a las críticas que desde el Consell ya se hicieran y, donde el Partido Popular puso el acento en las pasadas elecciones. En breve, tendrán que aclararse muchas cuestiones en este sentido y cómo afecta al PIB de la provincia.