Vox en Torrevieja reconoce que Miguel Hernández fue «objeto de la represión franquista»

Las declaraciones por la nulidad de los juicios contra Miguel Hernández se ha convertido en un galimatías de votos a favor y en contra tanto al texto original como a otros alternativos. El último en sumarse ha sido Vox en Torrevieja. La formación de Santiago Abascal, liderada en la ciudad de la sal por el médico Salvador Ruso, ha comunicado a través de una nota de prensa esye viernes que propone a los grupos políticos un texto que, si bien no recoge en su integridad el documento original avalado por la familia del poeta, sí asume buena parte de sus argumentos.

El texto señala al poeta como «un firme defensor de las libertades democráticas» y añade que «fue precisamente este compromiso el que le convirtió en objeto de la represión franquista».

En línea con lo esgrimido por la familia de Miguel Hernández, el documento propuesto por Vox señala que el autor oriolano fue condenado «injustamente a la pena de muerte, más tarde conmutada a 30 años de prisión». Además, inciden en que falleció en la prisión de Alicante el 28 de marzo de 1942, «a consecuencia de una intencionada inasistencia médica». Un hecho, continúan, «que sus familiares y numerosos estudiosos tipifican como 'asesinato por omisión'».

Los sumarios en cuestión, en este sentido, ratifica el texto de Vox, «carecieron de cualquier rigor jurídico, sin permitir al poeta defenderse de las acusaciones fabricadas por motivos ideológicos. El sistema judicial franquista, a través de consejos de guerra sumarísimos y sin garantías legales, persiguió a Miguel Hernández por su obra, sus escritos y su firme alineación con los principios democráticos». Por todo ello, concluyen, los procesos judiciales abiertos por el franquismo «fueron un acto de represión dirigidos a silenciar su voz, una voz que representaba un faro de esperanza y justicia para el pueblo».

Con este texto, aseguran desde Vox Torrevieja, esperan recabar el apoyo del resto de formaciones políticas con presencia en el Consistorio torrevejense, es decir, PSOE, Sueña Torrevieja y el PP del alcalde, Eduardo Dolón. Todo ello, dicen en su escrito, con el fin de que Torrevieja reconozca con este acto que Miguel Hernández «es una de las figuras más emblemáticas de la poesía en lengua española, así como un símbolo en la defensa de los derechos humanos y la democracia».

La portavoz del PSOE torrevejense, Bárbara Soler, a preguntas de este periódico, avanza que su grupo votará a favor del texto en tanto este es «casi idéntico» al que suscribe la familia de Miguel Hernández. Sin embargo, por parte de Sueña Torrevieja, su portavoz, Pablo Samper, señala que «por supuesto defenderemos la memoria de Miguel Hernández, como lo hicimos con las víctimas torrevejenses de los campos de concentración nazis, pero preferimos un texto común y no por iniciativa de Vox, un partido que a nivel nacional, no solo no ha condenado el franquismo, si no que muchos de sus dirigentes lo añoran».

Este movimiento supone un desmarque frente a la nota general que ha marcado la formación de Santiago Abascal allá donde la petición de nulidad de los juicios ha llegado. En el caso de Torrevieja, Vox, cabe reseñar, ya ha protagonizado algún desmarque respecto de la línea general seguida por el partido, por ejemplo, con su postura frente al colectivo LGTBI. Este mismo año, la formación censuraba la presencia de su concejal, Yolanda Cabezuelo, en el acto institucional organizado por el Ayuntamiento de Torrevieja con motivo de la celebración del día del Orgullo.

Respecto al asunto de Miguel Hernández, esta semana ha sido intensa en cuanto votaciones. El último lugar que ha pisado esta iniciativa abanderada por un conjunto de hernandianos y allegados a la familia del poeta ha sido la Diputación de Alicante. Allí, esta semana, PP, PSOE y Compromís unían sus votos para validar el texto original apoyado por la familia. Vox, sin embargo, fue la única formación que votó en contra como así ha hecho hasta ahora en todos los lugares donde se le ha planteado esta votación.

El PP ha sido hasta el momento la formación más incoherente respecto a su postura frente a esta iniciativa ciudadana. La polémica surgió cuando el texto avalado por la familia aterrizó en el pleno de Orihuela, la ciudad natal del poeta. Allí, el texto original fue elevado por el PSOE, recabó el apoyo de Cs y Cambiemos, pero finalmente salió rechazado con los votos mayoritarios del equipo de gobierno PP-Vox. Después el mismo texto llegó al pleno de Elche, donde salió aprobado gracias a la abstención del PP del alcalde ilicitano, Pablo Ruz.

El alcalde de Orihuela, Pepe Vegara, por su parte, propuso sin éxito al resto de formaciones políticas un texto alternativo al validado por la familia del poeta en aras de atraer el voto favorable de sus socios de gobierno de Vox. Este documento obviaba toda alusión explícita a la II República y a la dictadura franquista, así como eludía incidir en las circunstancias de la muerte del poeta y sus últimos días en la prisión de Alicante. Una propuesta que, tras el revuelo montado por el rechazo del PP en Orihuela, recogió como propia el Consell y el president de la Generalitat, Carlos Mazón, que esta semana daba visto bueno al texto modificado por el alcalde oriolano y que la familia de Miguel Hernández rechaza.

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