Perros que hablan para que la gente mantenga limpia la calle

La limpieza de las aceras viene siendo un problema en muchos pueblos de la provincia de Alicante. No es la excepción en Redován, municipio alicantino de la Vega Baja del Segura. El Ayuntamiento ha puesto en marcha una campaña con la que pretende sensibilizar a los vecinos sobre la limpieza de las calles, concretamente, a aquellos que tengan mascotas.

La campaña, titulada 'Tu mascota habla por ti', consiste en la instalación de pegatinas y creatividades visuales en el suelo de diferentes puntos del municipio. Los mensajes son claros y directos y apelan a la responsabilidad del propietario del animal.

La originalidad de estos mensajes radica en que están escritos en primera persona, como si fuese el mismo perro el que se dirigiese al dueño. Los adhesivos rezan frases como «Que nadie ensucie nuestra imagen», «Recoge mis 'cacas', que yo no puedo» o «No les abochornes: recoge sus cacas».

Esta novedosa iniciativa, tal y como ha explicado el concejal de Servicios, Parques y Jardines, Ramón López, «busca sensibilizar a la ciudadanía sobre la importancia de mantener en buen estado nuestras calles y espacios públicos, fomentando la recogida de excrementos y la limpieza de orines que los dueños de mascotas puedan dejar en las aceras, parques o lugares de paso».

Además, desde el Ayuntamiento recuerdan que incumplir estas acciones es una violación de la ordenanza municipal de convivencia ciudadana y puede contemplar sanciones de hasta 750 euros para aquellos que ensucien la vía pública. Es decir, el dueño de un animal de compañía que no recoja los excrementos, puede verse sancionado por esta ley.

De esta manera, el objetivo de la campaña «no es solo evitar una multa, sino que los dueños de mascotas sean conscientes de que la limpieza de la ciudad es una tarea compartida en la que ellos también deben poner de su parte para contribuir a un entorno más agradable, higiénico y respetuoso para todos», ha señalado el edil.

«Mantener las calles limpias ayuda a prevenir malos olores y posibles focos de enfermedades, protege el mobiliario urbano y las fachadas frente al deterioro, y contribuye a la convivencia ciudadana al mostrar civismo y respeto hacia los demás», ha señalado Ramón López. Una tarea que puede conseguirse de manera sencilla, «saliendo siempre de casa con bolsas para la recogida de excrementos y un recipiente o botella desinfectante para los orines», ha recordado.

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