Del Paradís al Carritxal, el misterio de las playas de La Vila Joiosa
Este municipio de Alicante cuenta con una decena de calas visibles y escondidas en las que conocer el pasado de la capital de la Marina Baixa
La Vila Joiosa es uno de los municipios más conocidos de la provincia de Alicante. Sus casas de colores en la playa Centro, el chocolate y sus museos, o las fiestas de Moros y Cristianos con el mítico Desembarco son algunos de los motivos por los que alicantinos y turistas acuden a lo largo del año, y sobre todo en verano, a conocer los misterios que aguardan en la capital de la Marina Baixa.
Durante su estancia en la localidad vilera, los visitantes acuden a las playas que rodean sus costas. La más conocida es la plaza Centro, ubicada a los pies del núcleo urbano de La Vila Joiosa. Cuentan con una dimensión de más de un kilómetro y también con el servicio de playas accesibles en la zona de la 'Basseta l'Oli' por la tranquilidad de sus aguas que la convierten en una balsa de aceite.
Otra de las playas más conocidas de La Vila Joiosa es el Paradís o Paraíso. Su nombre se debe a su ubicación y entorno. Es una amplia playa de más de un kilómetro de longitud cuyo terreno está compuesto por cantos rodados y arena. Además es de fácil acceso al contar con aparcamiento y con la parada Paradís de la línea 1 del Tram de Alicante, con destino a Benidorm.
Junto a esta playa se encuentra la cala del Bol Nou, de impresionantes aguas color turquesa, flanqueada por acantilados, causantes del encanto que aporta a sus visitantes. Los cantos finos son protagonistas en esta cala que también tiene un chiringuito con actuaciones por las noches. Cercana a esta, se encuentra La Caleta con un ambiente diferente al contar con palmeras a pie de playa y vegetación mediterránea a su alrededor. También tiene cantos finos y grava en lugar de arena, y es ideal para practicar snorkel.
Playas con torres romanas y de avistamiento pirata
La playa del Torres en La Vila Joiosa es famosa por la historia que la envuelve. En esta zona del municipio se encuentra la Torre de Sant Josep, el monumento funerario romano mejor conservado de la península ibérica. Asimismo, la playa del Torres cuenta con un amplio paseo marítimo invadido por la vegetación: eucaliptos, olivos e higueras son algunas de las especies arbóreas que se hallan en el entorno de este litoral de más de 500 metros, perfecto también para el buceo.
La historia continúa en el Racó del Conill, una cala ubicada entre los acantilados que conforman la ruta de la 'Colada de la Costa'. Es allí donde permanece la Torre del Aguiló, una de las torres vigía del siglo XVI. La cala está dividida en dos por una lengua de roca y cuenta con una ruta de snorkel para contemplar el fondo marino. Una de las curiosidades del Racó del Conill es su tradición nudista, la cual se remonta a los años 60.
La Torre del Xarco da nombre a esta playa de grava y cantos rodados. Su construcción, en lo alto de un promontorio, data del siglo XVII para divisar a los piratas corsarios que accedían por sorpresa al municipio para robar sus tesoros y secuestrar a sus habitantes. Esta playa vilera también ofrece la oportunidad de practicar snorkel y, además, uno de sus extremos es apto para mascotas.
Playas y calas escondidas en La Vila Joiosa
Son dos las playas que permanecen escondidas en las costas de La Vila Joiosa. En el caso de L'Esparrelló, playa naturista, su acceso es peatonal al estar ubicada entre dos acantilados. Está rodeada de naturaleza salvaje y dispone de aguas cristalinas en las que contemplar el fondo marino a simple vista o a través del buceo al bordear sus enormes rocas.
La playa del Carritxal es otra de las zonas costeras más misteriosas de la localidad vilera. Se trata de una cala natural de cantos rodados y roca, que limita con El Campello y con la playa del Xarco. Su acceso es difícil por lo que es muy poco frecuentada en verano.