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El antes y el despúes de estas monedas. T.A.
El tesoro alicantino que vuelve a relucir

El tesoro alicantino que vuelve a relucir

UNIVERSIDAD DE ALICANTE ·

Las 53 monedas de oro encontradas en las costas de Xàbia recuperan su estado inicial tras permanecer dos siglos bajo el mar

Adrián Mazón

Alicante

Miércoles, 16 de noviembre 2022, 08:26

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Esta es una historia sobre la riqueza que albergan los fondos marinos. No por la amplia variedad de organismos y especies que viven en ellos. Más bien por las grandes fortunas que, en un momento dado, decidieron reposar sobre las profundidades de su lecho. En concreto en el Mediterráneo. Un mar que, a lo largo de la historia, ha servido como puente entre civilizaciones. Testigo único de todas las culturas que han existido en el planeta.

Y que, a merced de la casualidad, solo unos pocos han podido conocer. ¿Aventureros o cazafortunas? Nada de eso, solo dos aficionados con mucha suerte. Este es el caso de una pareja de submarinistas que el verano pasado decidió sumergirse en las costas de Xàbia y, para su sopresa, se topó con un descubrimiento del que ni ellos mismos fueron conscientes.

Ocho monedas de oro. Este fue el tesoro que encontraron y por el que dieron aviso inmediato a la Dirección General de Patrimonio. Tras verificar su importancia, la Generalitat encargó al Instituto de Arqueología y Patrimonio Histórico (INAPH) de la Universidad de Alicante organizar una excavación para indagar en este hallazgo.

Un equipo de arqueólogos documentaron el proceso de excavación.
Un equipo de arqueólogos documentaron el proceso de excavación. T.A.

Una misión que, en coordinación con el museo Soler Blasco del municipio y el apoyo del Grupo de Actividades Subacuáticas de la Guardia Civil de Alicante, logró recuperar un total de 53 monedas de oro que, según el estudio preliminar, datan de finales del siglo IV y principios del V. Épocas gobernadas por los emperadores Arcadio, Valentiniano, Teodosio y Honorio.

El oro de Roma recupera su brillo

El medio centenar de divisas recupera su esplendor un año después. Y es que los trabajos no culminaron con esta intervención arqueológica. Las nuevas monedas se depositaron en el Institut Valencià de Conservació, Restauració i Investigació (IVCR+i) para su investigación y restauración.

Una vez puestas sobre la mesa, llegó el momento de hacer una radiografía de las monedas. Para ello, los investigadores emplearon la microfotografía y los análisis físico-químicos para documentar su estado de conservación. Las divisas presentaban, como principal problema, adherencias de origen biológico producidas por la incrustación de organismos marinos. Consecuencia de permanecer casi dos siglos bajo el mar.

Buzos en una visita subacuática al pecio Bou Ferrer. t.a.

Un patrimonio bajo las aguas

Íberos, romanos, griegos o egipcios. Fueron muchas las civilizaciones que, a lo largo de los siglos, surcaron el Mediterráneo en busca de nuevos territorios en los que asentarse con el fin de expandir sus imperios. Su paso dejó huella en ciudades norteafricanas y del sur de Europa, a la vista queda. Pero lo que nunca llegaron a saber es que gran parte de su ajuar permaneció conservado por las aguas de un mar cuyo cometido ha sido el de unir culturas.

Las costas de Alicante albergan un sinfín de elementos perdidos que conforman un patrimonio sumergido único en el mundo. Es el caso de la Vila Joiosa con el pecio Bou Ferrer, hundido en la época de Nerón, cuyas ánforas todavía permanecen intactas. O el del yacimiento submarino de la playa de la Albufereta, donde a tan solo 800 metros de las toallas de sus bañistas se encontró otra nave romana.

Después de documentar el aspecto, se procedió a la limpieza con baños en ultrasonidos, un proceso de secado con temperatura controlada y la limpieza final de adherencias por medios mecánicos. Asimismo, se ha realizado el análisis metalográfico del oro por fluorescencia de rayos X para determinar las características del metal y su grado de pureza.

Tras conocer el estado de las monedas, y con los datos obtenidos en la excavación, un grupo de investigadores de la UA, junto a los técnicos del Museo Arqueológico y Etnográfico Soler Blasco de Xàbia, realizarán su estudio científico. Una vez se publiquen los resultados, las divisas volverán a este municipio de la Marina Alta para ser expuestas de forma permanente.

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