El Mercado Central de Alicante, epicentro de la venta de palmas para el Domingo de Ramos

Frutas, pescados, carnes, huevos, vermú... y desde este jueves también palmas. Estos elementos, característicos y propios del Domingo de Ramos -que se celebrará este 13 de abril-, ya lucen en los puestos ubicados a loas puertas del Mercado Central de Alicante.

Ha sido este jueves cuando la familia Moreno ha regresado a la avenida Alfonso el Sabio, junto a las escaleras del Mercado Central, con sus puestos de palma blanca. «Llevamos toda la vida trayendo las palmas, más de 80 de tradición familiar».

Juan Moreno es su actual responsable, heredero de un negocio familiar basado en «el arte de ser artesanos». Este hombre, «soy gitano alicantino», presume con mucho orgullo, es el encargado de continuar con una tradición que «se va perdiendo» con el paso de los año, se lamenta.

El catálogo de palmas, expuesto sobre las mesas y en pie junto a los tenderetes, cuenta con multitud de palmas pequeñas y otras tantas de solapa. Son las más vendidas en los últimos años, pues «las mozas ya no quieren llevar palmas, ahora quieren las de solapa».

Tanto grandes -que las hay, aunque en menor cantidad- como pequeñas, todas proceden de la provincia de Alicante. «La materia prima la adquirimos en Elche y Orihuela». Desde ahí las llevan a su taller para darles las distintas formas.

Sobre este trabajo también presume Juan Moreno. Él y su familia trabajan la palma blanca desde el mes de noviembre. Sobre cuánto tiempo tardan en aderezarlas confiesa que hay diseños que van desde los quince minutos, los simples, hasta los más laboriosos con un plazo de tres horas como mínimo.

Una vez listas, esta familia guarda y custodia las palmas en cámaras especiales para que se conserven en perfecto estado hasta estos días de venta con la vista puesta en el Domingo de Ramos, cuando se lucirán durante la procesión de Jesús Triunfante, conocida como 'La Burrita'.

En cuanto a las ventas, Juan Moreno explica que son los alicantinos quienes se llevan las palmas, aunque los turistas se muestran sorprendidos ante estos productos y el resultado final, ese que la familia elabora al más puro estilo artesano desde hace más de 80 años.

A las espaldas del Mercado Central, en la plaza del 25 de Mayo, hay también otros puestos de venta de palma blanca. En uno de ellos está Pepi Moreno. En su caso, las palmas de solapa también son las más vendidas.

Esta comerciante también cuenta con una gran historia familiar detrás. Habla de Ginés Moreno, su padre, quien «ofrendaba al paso de Campoamor con su palma y ganó el concurso durante tres años». Este es uno de los relatos que cuenta a quien se acerca al puesto, turistas incluidos, para continuar en Alicante con esta tradición de la Semana Santa.

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