Herido un funcionario de la cárcel de Villena tras ser agredido por un preso

Un funcionario del Centro Penitenciario de Villena ha requerido asistencia médica tras ser agredido por un interno este miércoles, 21 de mayo. El sindicato ACAIP-UGT tacha de «insostenible» la situación de la prisión alicantina y exige «un cambio de rumbo» en la dirección del centro.

Los hechos tuvieron lugar en el departamento de aislamiento, cuando los funcionarios de servicio procedían a acompañar al preso H.Z. a su salida reglamentaria al patio. De forma sorpresiva y sin previo aviso, el recluso se abalanzó sobre los trabajadores, insultándolos, profiriendo amenazas y tratando de agredirles. Uno de los trabajadores recibió un fuerte golpe en el pómulo que requirió atención médica.

El jefe de servicios, junto con otros funcionarios, se personó rápidamente en el módulo y lograron controlar la situación a pesar del alto nivel de agresividad del interno.

Desde la ACAIP-UGT advierten que el número de incidentes registrados en el centro penitenciario de Villena es «alarmante». «La dirección del centro ha adoptado una línea de gestión que desatiende la realidad, lo que da lugar a una separación interna de los reclusos que no responde a criterios de idoneidad, dificultando la convivencia en los módulos e impidiendo el desarrollo adecuado de las actividades de tratamiento», han manfiestado en un comunicado.

En 2024 se registraron 238 incidentes entre internos, de los cuales 105 acabaron con lesiones de diversa consideración, y 11 funcionarios fueron agredidos en el mismo periodo. Unas cifras «inaceptables», especialmente cuando ya se ha advertido a la dirección del centro sobre la necesidad urgente de aplicar criterios de clasificación ajustados al perfil real de los internos, señalan desde la organización. «La búsqueda de resultados estadísticos maquillados no puede prevalecer sobre la seguridad y el bienestar tanto de los trabajadores como de las personas privadas de libertad», añaden.

Desde el sindicato exigen un cambio de rumbo en la gestión del centro y un «compromiso firme» por parte de la directora con los profesionales penitenciarios, con el objetivo de «revertir una situación cada vez más insostenible».