Detienen en el aeropuerto de Alicante-Elche a un violento fugitivo británico que propinó una brutal paliza a dos soldados americanos

Un violento fugitivo británico que llevaba 20 días burlando a la Justicia alemana ha sido localizado y detenido en el aeropuerto de Alicante-Elche. Sobre el prófugo pesaba una Orden Europea de Detención para Extradición (OEDE) por un delito de homicidio en grado de tentativa.

El fugitivo, culturista y experto en artes marciales, propinó una brutal paliza a dos soldados estadonuidenses en el interior de un restaurante. Las víctimas ingresaron en un hospital en esta crítico y llegó a temerse por sus vidas, según ha informado la Policía Nacional en un comunicado.

Los agentes de la Policía Nacional llevaron a cabo la detención durante las labores de inspección y control de pasajeros del aeropuerto. Sobre uno de ellos saltó la orden de detención, ya que se le buscaba por hechos que tenían aparejada una pena máxima de prisión de 15 años.

El fugitivo había huido de la Justicia desde que cometió el delito el pasado día 2 de junio. Los hechos ocurrieron de madrugada en el exterior de un restaurante conocido de su país, cuando actuando conjuntamente con otros dos individuos, atacaron de forma repentina y sin motivo aparente a dos soldados estadounidenses.

El detenido, que practicaba artes marciales y culturismo de forma habitual, se encontraba en una condición física fuera de la habitual. Tales eran sus características y su estado de forma, que consiguió «noquear» a los dos soldados sin mayor esfuerzo.

También demostró un alto grado de violencia en su comportamiento. Incluso cuando sus víctimas se encontraban en el suelo inconscientes, no ceso su actitud hostil contra ellos. Continuó golpeándolos con gran potencia mientras se encontraban en el suelo, en zonas vitales y en la cabeza.

Finalmente abandono el lugar de los hechos junto con sus acompañantes cuando supo que los testigos que se encontraban allí presentes, habían llamado a la policía. De la agresión resultaron heridos de gravedad los dos militares, llegando a temer por sus vidas.

El detenido, de 32 años de edad y nacionalidad británica, fue puesto a disposición del Juzgado Central de Instrucción de la Audiencia Nacional, órgano encargado de realizar los trámites para su posterior extradición.

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