Más del 74 % de las mujeres jóvenes de la Comunitat Valenciana sufren violencia de género digital
El estudio de la UA y la Generalitat analiza plataformas y redes y deja al descubierto que se valora más el castigo frente a la rehabilitación como medida disuasoria
Los ámbitos de la violencia de género también incluyen los canales digitales y así lo demuestra el estudio realizado por investigadoras de la Universidad de Alicante. El informe apunta a que un 74,4 % de las mujeres jóvenes de la Comunitat Valenciana han sufrido alguna situación de violencia de género digital en plataformas online o redes sociales.
El documento, que también cuenta con el apoyo de la Generalitat Valenciana. recoge que el 44,4 % de las participantes han padecido comentarios sexistas o misóginos. Ese porcentaje se sitúa en el 41,9 % cuando se trata de insultos o comentarios abusivos y al 39,1 % si se refiere a insinuaciones inapropiadas, humillantes, intimidatorias u ofensivas en las redes sociales (39,1 %). Entre las formas de violencia, también se ha medido que el 36,8 % afirma haber recibido emails, mensajes de WhatsApp o de texto sexualmente explícitos e inapropiados de carácter ofensivo e intimidador y el 33,6 %mensajes ofensivos o amenazantes por email, mensajes de texto e instantáneos.
9 de cada 10
han vivido o presenciado situaciones de violencia de género digital
Según el grado de prevalencia de la violencia de género digital, los datos ponen de manifiesto que casi 9 de cada 10 personas jóvenes, el 87,8 %, han presenciado o vivido una o más situaciones de este tipo de violencia. Entre los hombres jóvenes, un 82,3 % ha sido testigo de por lo menos una situación de violencia de género digital y algo más de 8 de cada 10 mujeres jóvenes, el 80,4 %, han sido víctimas de violencia de género digital en algún momento de su vida.
Bloquear e ignorar
El estudio señala que, ante una situación de violencia de género digital, las mujeres víctimas tendieron mayoritariamente a bloquear y, en menor medida, a reportar la situación a la empresa que gestiona la web o a la propia red social. Además, las mujeres víctimas optaron por buscar ayuda en sus círculos familiares, amistades o en profesionales de la psicología.
En este sentido, algo más de 9 de cada 10 mujeres víctimas de violencia de género digital sufrieron consecuencias psicológicas. «Entre las personas testigo esta proporción se reduce al 75,3 %», señala la coautora del estudio y directora del Instituto Universitario de Investigación de Estudios de Género de la UA, Alejandra Hernández-Ruiz. Entre las víctimas, las consecuencias psicológicas más frecuentes fueron la ansiedad, la pérdida de autoestima y la angustia, mientras que entre las personas testigo primaron los sentimientos de enfado, la angustia y el miedo.
Las consecuencias psicológicas más frecuentes fueron la ansiedad, la pérdida de autoestima y la angustia
Con relación a la actuación institucional ante la violencia de género digital, «el teléfono 016 fue el organismo más conocido, casi 8 de cada 10 expresaron conocerlo», detalla la investigadora de la UA. Respecto a las tres formas de intervención de mayor utilidad percibida por las personas encuestadas han sido la formación de los jóvenes en el respeto mutuo, el castigo a los agresores y el teléfono 016.
Las respuestas y las valoraciones
«Por otra parte, una clara mayoría, algo más de 8 de cada 10, opina que las campañas de concienciación contra la violencia de género digital le ayudaron a tomar conciencia del problema», añade.
Respecto a la eficacia de los sistemas para combatirla, y en pleno proceso de reevaluación de los sistemas de protección, el estudio señala la formación y la incorporación de más medios, como primera y tercera respuesta más eficiente. Lo que sorprende es la segunda que es el castigo. No obstante, el documento indica que ninguna de las medidas habituales de protección son eficientes por sí solas.
Los hombres de 18 a 24 años resultan ser los más escépticos respecto a la eficacia de las medidas. Como conclusión, el estudio subraya que «el hecho de que tanto el castigo a los agresores como su rehabilitación no presenten diferencias significativas, según el sexo o el sexo combinado con la edad, indica un acuerdo general en la superior valoración del castigo frente a la rehabilitación».
«De este modo, observamos que el castigo se encuentra entre las tres medidas percibidas como de mayor eficacia en todos los segmentos a excepción del de las mujeres de 25 a 35 años; mientras que, en todos los segmentos, la rehabilitación se sitúa entre las dos últimas medidas en términos de eficacia percibida», añade.
Finalmente, «pese a que algunas plataformas cuentan con diversas políticas y normas, se observa que son escasas. Además, las medidas contra la violencia de género digital se implementan cuando la víctima ya ha recibido la agresión o el acoso, a excepción de Twitch que permite protegerse contra este tipo de contenidos en directo», advierte Hernández-Ruiz.
La investigación se realizó a través de más de 1.100 encuestas online a chicas y chicos de entre 18 y 35 años residentes en la Comunitat durante los meses de marzo y abril de 2023, junto con un análisis cualitativo acerca de los mecanismos de reporte de 17 plataformas digitales. Sus titulares son Alejandra Hernández-Ruiz y Romina Curone-Prieto, de la Universidad de Alicante, Iolanda Tortajada y Cilia Willem, de la Universitat Rovira i Virgili, e Inmaculada J. Martínez, de la Universidad de Murcia.
El estudio «Violencia de género digital en población joven de la Comunitat Valenciana: prevalencia, impacto y mecanismos de reporte en plataformas digitales» ha sido promovido en el contexto del convenio de colaboración entre la Universidad de Alicante y la Generalitat Valenciana, a través de la Vicepresidencia Segunda y la Consellería de Servicios Sociales, Igualdad y Vivienda, para el fomento de actividades que incorporen la perspectiva de género de forma transversal.
