Alex Roca, atleta con un 76% de discapacidad: «Para mí correr hacia la meta es correr hacia la vida»

Entre bromas y con una sonrisa se presentaba este martes Alex Roca en Alicante. El atleta y conferenciante de 33 años, con una discapacidad física del 76% provocada por una parálisis cerebral, llegaba al campo de golf El Plantío para contar su historia, la de un luchador que ha conseguido superar toda clase de adversidades, y se iba habiendo dejado una lección de vida a los casi 100 empresarios alicantinos que han acudido a una de las Conferencias Circulares de la Cámara de Comercio.

Junto con él ha estado su esposa e intérprete, Mari Carme, el presidente del organismo cameral, Carlos Baño, y el vicepresidente y uno de los dueños de Carmencita, Jesús Navarro. Desde sus primeros años de vida hasta completar la maratón de París de los Juegos Olímpicos. El salón se ha llenado de anécdotas e historias contadas por Roca, quien ha resaltado en todo momento la importancia de los retos y del deporte para llegar a ser quien es.

«Una persona sin retos es una persona muerta en vida», explicaba Roca ante los presentes mediante un lenguaje de signos adaptado especialmente para él, ya que solo puede mover un brazo. «Cada día tenemos que tener ambición, ganas de ser mejores, para así sentirnos vivo», asegura el atleta, quien recuerda que «una de las cosas que más me ha ayudado a desconectar es el deporte».

Roca ha sido capaz de acabar una de las carreras más duras del mundo como es la Titan Desert, por el desierto del Sáhara. A este espectacular logro se le suma un repertorio sorprendente de cinco triatlones, un aquatlón y 11 medias maratones, siendo además la única persona del mundo con este grado de discapacidad en terminar una maratón.

«Para mí correr hacia la meta es correr hacia la vida», comentaba Roca, quien recuerda que la primera media maratón «me costó mucho acabarla y me emocioné muchísimo». Especialmente por el reto que supuso hacerla contra todo pronóstico. Y es que Alex tuvo que operarse varias veces del pie al tener una lesión: «Me decían que mi pie era imposible que corriese un kilómetro», rememora el conferenciante, quien tan solo este año ha corrido cinco medias maratones en tan solo dos meses.

«Ahora me veis sonriente pero mi vida no ha sido fácil», admitía Roca mientras se sucedían en las pantallas imágenes suyas de pequeño. «Desde pequeño tenía dos mundos: el de casa y el colegio donde me sentía bien, pero luego estaba el mundo de la calle, donde todos me miraban y me sentía como un monstruo», subraya Roca, quien narra que fue «gracias a la confianza de mi gente que luché y me hizo ser como soy».

Con problemas evidentes que ha superado, el atleta catalán ha querido dejar claro que «yo no nací 'normal', no me gusta esa palabra». A los seis meses sufrió el herpes cerebral que le provocó la parálisis y los médicos pronosticaban que no viviría. Barreras que ha ido superando gracias a sus ídolos y ejemplos. Uno de ellos fue su abuelo, quien falleció hace dos años.

«Soy como soy gracias a él», asegura Roca, quien rememora que los médicos decían que «yo nunca andaría y él siempre confió en mí». A los tres años Alex consiguió dar sus primeros pasos y a los 18 se sacó el carnet de conducir, a la primera. «Vamos tan rápido en la vida que no paramos a pensar en la suerte que tenemos de hacer cosas», explica Roca, quien afirma que «poder andar es una suerte».

Otro de sus referentes que no ha faltado en la conferencia es su hermano, quien corría triatlones. Roca le veía como lo hacía y de adolescente quería imitarle. «Ver a mi hermano haciendo esas cosas me hacía desear poder realizarlas también». Es entonces cuando se propuso realizar un triatlón, pese a que todo el mundo «me decía que estaba loco», pero lo hizo. Con un neopreno y una máscara de buceo para respirar en la natación y una bici adaptada de tres ruedas.

Abierta la veda entrenó con su tío, quien le propuso por primera vez subirse a una bicicleta de dos personas. De ahí se planteó un reto mayúsculo: la Titan Desert en 2018. «Entrené en un año e hice más de 7.000 kilómetros», recuerda Roca, quien tuvo que parar en la tercera etapa de las seis que hay: «Los médicos me dijero que sí o sí tenía que parar». A pesar de ello, volvió al año siguiente más preparado y con muchas ganas y consiguió acabar la carrera «gracias al esfuerzo en equipo», asegura el atleta, quien cuenta con un palmarés extraordinario.

Con su historia, Roca ha conseguido poner de pie a todo el salón y los participantes, quienes se han deshecho en elogios y aplausos para el atleta de 33 años. El vicepresidente de la Cámara, Jesús Navarro, lo ha calificado como «ejemplo de superación» y ha explicado que los empresarios pueden fijarse en la historia de una persona «que emociona y que se ha impuesto a todos los problemas que se ha encontrado».

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