Mazón reúne en Alicante el pleno del Consell en funciones por primera vez desde su dimisión
La sesión tiene lugar en la Ciudad de la Luz
Carlos Mazón ha reunido al pleno del Consell en Alicante, su tierra natal. Es la primera sesión del gobierno autonómico en funciones después de que el presidente de la Generalitat Valenciana renunciara este lunes al cargo. Una sesión muy especial, por tanto, que ha tenido lugar también en un lugar extraordinario: la Ciudad de la Luz.
No es usual, pero tampoco es la primera vez. El equipo de Mazón ha elegido este lugar para evitar a los numerosos medios de comunicación que se han dado cita en las inmediaciones del complejo de rodaje desde primera hora de la mañana. Conexiones televisivas casi desde el amanecer y una batería de cámaras situadas a las puertas de las instalaciones cinematográficas enfocaban a cada vehículo que se acercaba por la puerta.
Pero no buscaban a ninguna estrella del cine, sino a los componentes del pleno del Consell que acudían, uno por uno, en sus vehículos oficiales con las lunas tintadas. El último en aparecer fue el convoy del presidente, Carlos Mazón, en un vehículo escoltado por otro que venía por detras.
Eran las diez y media de la mañana, hora en la que tenía que haber empezado la reunión del Ejecutivo autonómico. Pero todo se retrasaba. Este martes poco importan estas cosas. Hace un mes que el propio Mazón había fijado este martes 4 de noviembre para una crisis de gobierno con la salida del vicepresidente Gan Pampols. Pocos entonces en el Consell hubieran creído que la reunión de esta jornada tendría tintes bien distintos.
Pero aguantaron bien el tipo cuando las cámaras y fotógrafos les retrataron. Una enorme sala para reunirse a estas diez personas que mantenían la compostura. Sin seriedad, pero tampoco con desparpajo. El presidente hacía de tripas corazón e intentaba llevar la 'nueva normalidad' con una charla con Gan Pampols, quien se despide este martes de sus compañeros. Sin corbata, con ese aire informal que Mazón ha trasladado tantas veces al Consell.
Han sido unos minutos tan esperados como deseados para terminar. De puertas para adentro, las competencias de un Consell en funciones son limitadas, tal vez insuficientes para llevar adelante obras y decisiones imprescindibles para la reconstrucción que aún necesita Valencia. Pero es lo que hay en estos momentos.
La vicepresidenta y portavoz del Consell, Susana Camarero, dará luego cuenta de los acuerdos tomados. El primero, la sustitución de Gan Pampols, cuyas competencias deberían ir al conseller de Infraestructuras, Vicente Martínez Mus. Lo confirmará en unos minutos.
Mientras, sus compañeros abandonan la Ciudad de la Luz cada uno en su conselleria. Toca trabajar y seguir. ¿Hasta cuándo? Esa es la gran pregunta que se hacen todos este martes aquí.