La Diputación aprueba la compra de su sede en Benidorm

En el anterior pleno de mayo, antes de las elecciones, se aprobó una modificación de crédito de 24 millones de euros para financiar diversos proyectos, entre los que se incluía 6,7 millones de euros para la compra de un edificio histórico para abrir una sede de la Diputación en el centro de Elche. Esta propuesta salió entonces sin votos en contra.

Los planes de descentralización de la Diputación Provincial de Alicante incluyen la creación de dos sedes en Elche y Benidorm, con dos funcionalides bien distintas. Mientras el primero será más de carácter administrativo, el de la Marina Baja tendrá una identidad meramente cultural. En este sentido, la nueva delegación se nutrirá de la amplia oferta artística, humanística, literaria y musical que sustenta la Diputación de Alicante a través del Marq, el Mubag, el Adda o el Instituto de Cultura Juan Gil-Albert, ofreciendo además atención directa a los vecinos y colectivos del municipio.

Por el momento, todavía no es pública la ubicación de esta nueva sede, ni si se rehabilitará un edificio o se levantará sobre un solar. Lo único es que estará ubicado en el centro histórico de Benidorm. Para las obras, la Diputación destinará 5,2 millones de euros.

Para la fijación del precio de licitación se han tenido en cuenta las conclusiones del estudio de mercado y análisis de precios de venta de inmuebles para uso terciario el centro histórico de Benidorm realizado por una empresa de tasación inscrita en el Registro de Entidades Especializadas en Tasación del Banco de España.

El pleno de mayo ya aprobó la compra del inmueble en la ciudad ilicitana y este de junio, el de Benidorm. El resto de puntos era meramente formalidad, como la modificación de la plantilla del Instituto de Cultural Alicantina Juan Gil-Albert y la remuneración del director cultural del ente.

Por cierto, que Compromís se ha abstenido en este punto, lo que ha alegrado al presidente, Carlos Mazón. Ha reprochado al portavoz nacionalista, Gerard Fullana, que no acudiese el martes a la junta del Gil-Albert donde se trató el tema.

Y es que sus señorías están ya más para otras cosas. Muchos de los presentes cambiarán el Palacio Provincial por el del Palau. El primero, el presidente, Carlos Mazón. Muchos diputados provinciales van en listas a Les Corts y todos ellos están pensando ya más en la próxima legislatura que en esta.

No obstante, todavía queda un pleno ordinario en julio antes de constituirse la nueva Corporación, que será el momento de las despedidas. Esto debería ser en la segunda quincena de julio, pero con la convocatoria de elecciones generales, igual este año se puede aplazar hasta agosto.