Borrar
El empresario Víctor de Aldama y la exmilitante socialista Leire Díez. EP

El bochorno

Hemos asistido al descubrimiento de todo el lado oscuro de un partido, reflejo de su líder

Antonio Manresa

Alicante

Miércoles, 4 de junio 2025, 15:58

Después de ver la rueda de prensa de Leire Díaz, la mayoría de los españoles sentiremos vergüenza; los nacionalistas, no. Ellos estarán felices de ver cómo se está derrumbando toda la dignidad de las instituciones, como cada día más tienen atrapado a Pedro Sánchez. Cómo nos tienen arrollados y cómo la premisa fundamental de cualquier político, que es el bienestar de la ciudadanía, se ha ido al garete. Parece que por mucho repetirla nadie se acuerda.

Hemos asistido al descubrimiento de todo el lado oscuro de un partido, reflejo de su líder. Aquel que escondió urnas para ganar unas primarias; que un arrebato de dignidad se fue derrumbando, pero se conjuró para ganar como fuera, y ganó. Estamos viendo su reflejo con toda la porquería que está saliendo. Vemos cuál ha sido la configuración de sus peones, torres, alfiles y caballos. Ninguno con su movimiento en el tablero, todos a defender al rey de cualquier forma y todos a hacerlo de manera kamikaze. Ese culto al líder sin capacidad de introspección ni de autocrítica es muy dado en personas a las que la libertad les escuece. El miedo y la inseguridad hacen que vaya creciendo en el líder una obsesión por el control de todo y de todos. Cualquier pensamiento no acorde con la línea de pensamiento equivale al ostracismo. Ese es el camino que lleva el sanchismo.

El partido socialista, un gran partido, con gente muy válida dentro. Esa gente válida está callada y, como dijo Edmund Burke, «para que el mal triunfe solo se necesita que los buenos no hagan nada». El mal está triunfando, este miércoles se ha televisado y hemos sido testigos de que no pasará mañana. Una de las voces que más hemos escuchado pide reflexión y un retorno a la vía del entendimiento con el otro partido mayoritario (si todo sigue así, va a ser el partido mayoritario): el Partido Popular. Es la del presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García Page. Intenta hacer algo, pero lo tienen absolutamente arrinconado. Si hablamos de históricos del PSOE, como Felipe González o Alfonso Guerra, todos ellos tildados de lo peor por pedir volver a la senda del consenso y salirse de esos socios que van a devorar a los socialistas por dentro y por fuera.

Estamos sumidos en una especie de 'cosa nostra' de la que están intentado pasar de puntillas parte del Gobierno, los medios de comunicación afines (los bomberos ya no dan abasto) y tienen también parte de culpa. Forman parte de ese grupo donde no existe la autocrítica ni la introspección. Además de aceptar la teoría del enfrentamiento. La sociedad española puede que tenga más paciencia que otras sociedades, pero estallará como todas. Estamos asistiendo a un hastío de toda esta podredumbre que tiene un origen. El origen es el motivo del por qué el PSOE hizo una moción de censura en el 2018 al PP: la corrupción. En este 2025, la corrupción está en casi todos los estamentos de gobierno, desde la consecución de la presidencia del Ejecutivo, siete votos a cambio de humillar a un país entero. Por culpa de unos supremacistas. Como diría la canción de Radio Futura 'Han caído los dos', estamos «sometidos a una insoportable tensión de silencio».

El futuro que se presenta, desde mi punto de vista, es solo uno: la convocatoria de elecciones anticipadas. Tengo claro que no va a suceder, ya dijo un ministro que no les importaba lo que pasara, ellos iban a aguantar (he suavizado el mensaje) pasara lo que pasara. Pero esto que para ellos así lo creen, es bueno, se convierte en malo para el país y no sé si lo creerán, para ellos, los sanchistas, peor por ende para el PSOE. Porque aunque digamos, el sanchismo, que lo decimos para no dañara más de lo debido al PSOE, al final el sanchismo es PSOE y eso ahora mismo es malo para España. Solo nos queda esperar que los buenos que hay dentro del socialismo se rebelen y digan hasta aquí hemos llegado. Solo nos queda esa esperanza, necesitamos certidumbre. Visto lo visto eso no está en la agenda sanchista.

Esta funcionalidad es exclusiva para registrados.

Reporta un error en esta noticia

* Campos obligatorios

todoalicante El bochorno

El bochorno