Lo que debes saber para ir con tu perro a las playas de Alicante
Llevar agua dulce y sombrillas para soportar el calor y vigilar a los canes en el momento del baño son algunos de los consejos que ofrecen los veterinarios
Las mascotas son un miembro más de la familia. Sus dueños tratan de incluir a los animales en todos y cada uno de sus planes de ocio. El verano es un buen momento para ello. En un momento de ola de calor como el que azota la provincia estos días, visitar cualquiera de las playas caninas de la provincia resulta un alivio y un refresco para soportar las altas temperaturas.
Los animales son «más propensos a recibir un golpe de calor» debido a los cambios bruscos de temperatura, explica la veterinaria de Purina, Sònia Sáez. Por ello, resulta necesario convertir sus rutinas en cuidados, además de proporcionar experiencias que les ayuden a refrescarse y disminuir su temperatura.
Una de ellas puede ser un baño en las playas para perros que hay repartidas por la provincia. La cala del Rocío en Torrevieja, la del Xarco en La Vila Joiosa, la dels Gossets en Santa Pola o la de Agua Amarga en Alicante son algunos de los puntos de baño en los que pueden acceder los canes.
Sin embargo, a la hora de disfrutar de una jornada de mar y arena con perros, resulta imprescindible seguir una serie de consejos para garantizar su bienestar. Entre ellos, es importante «tener cuidado si el calor es excesivo» y, para ello, hay que «proteger a tu perro de la deshidratación llevando siempre agua dulce para que vaya bebiendo con frecuencia» e «incorpora una sombrilla por si no hay zonas de sombra», apunta la experta.
Una vez en la arena, los dueños de las mascotas deberán prestar atención a las banderas y al estado del agua. El mar «es peligroso por las mareas y corrientes», por lo que hay que informarse antes de entrar a disfrutar de un baño y «atender las advertencias de peligro». La veterinaria incide también en no perder «nunca de vista a tu perro» y, en caso de ser conveniente, jugar con él en la orilla para garantizar la seguridad.
Paseos por la arena y baños en el mar
A la hora de disfrutar de un paseo por la orilla de las playas de Alicante, en las que se permita el acceso y baño de perros, hay que tener en cuenta el tipo de elementos que persisten en la arena: rocas, conchas, espinas, anzuelos, cristales o restos que puedan ser cortantes. Los dueños de los animales deben ir con cuidado para evitar que estos pisen en lugares indebidos y sufran «daños en las almohadillas».
También, de cara a darse un baño, la veterinaria insiste en «prestar atención en todo momento a tu perro porque podría tragar demasiada agua o entrarle por la nariz», esto podría llegar a requerir atención veterinaria.
Y es que el agua salada «puede ser perjudicial» para los canes y provocarles vómitos y diarrea, por lo que hay que «vigilar que no ingiera» este líquido, ya que «no es beneficiosa para los perros».
Además, en caso de que el animal tenga heridas o la piel irritada, «mejor no vayas a la playa hasta que se cure, ya que la arena puede empeorarlas».
Un baño al volver a casa
Tras disfrutar de una refrescante jornada de playa con tu perro en Alicante, la veterinaria de Purina, Sònia Sáez, apunta a la importancia de «planear una vuelta a casa tranquila y con unas pautas de higiene básicas tras el baño de agua salada».
Los dueños de estas mascotas deben bañar con agua dulce a los animales para eliminar la sal y la arena de su pelo y piel. En este momento, también se pueden limpiar sus orejas con una gasa para «arrastrar los restos de agua y arena evitando así una posible patología en el oído».
A la hora de secar, la experta insiste en secar «bien especialmente» las orejas y las patas para «evitar otitis y dermatitis», así como «aprovechar para revisar su piel y asegurar que no tenga ninguna herida o lesión».