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El Hércules ha dicho prácticamente adiós este sábado a sus opciones de jugar la promoción de ascenso. Demasiadas derrotas para soñar con algo importante esta temporada. Hasta 13 en 33 partidos. Otra fuera de casa, una mala imagen en la segunda mitad ante un rival que parecía propicio para haber dado un golpe encima de la mesa.
El Hércules ha perdido 2-1 en la Ciudad Deportiva Luis del Sol pese a avanzarse en el marcador a los veinte minutos con un tanto de Agustín Coscia, que con su pundonor habitual supo aprovechar el rechace de un penalti fallado por Nico Espinosa.
Todo parecía ir sobre ruedas. El Hércules había salido mandando antes el Betis Deportivo. El equipo alicantino era consciente de que había que ganar para meter presión al Mérida. Posesión de balón y un penalti claro forzado por Samu Vázquez.
Pero todo se empezó a torcer poco después. Falta lateral a favor del cuadro verdiblanco y falta de contundencia habitual de los zagueros herculanos. Una combinación que acabó en el empate a uno anotado por Carlos Reina.
El Betis pudo hacer el segundo poco después tras un grave error de Josema en la salida de balón. El balón le llegó a Souleymane, que disparó cruzado y la pelota salió rozando el poste de Carlos Abad.
El Hércules también tuvo una ocasión muy clara para cobrar ventaja antes del paso por el vestuario. Pero no era el día de Nico Espinosa. Su disparo, que desvío un defensa, lo sacó con una mano prodigiosa el meta portugués del Betis Guilherme.
Y en la segunda parte todo se vino abajo. Aunque el Hércules avisó con un disparó de Coscia ante el que respondió nuevamente Guilherme, el Hércules empezó a sufrir y Abad tuvo que multiplicarse.
Los alicantinos dejaron de tener el balón y el Betis empezó a imponerse de verdad.
Fue otra perdida en la salida del balón la que provocó el 2-1 definitivo. Error de Samu Vázquez en un saque de puerta precipitado de Carlos Abad y el Betis no perdonó. Paciencia, recortes y gol final de Marcos Fernández.
El Hércules no reaccionó. Se quedó en la lona y el empate nunca dio la sensación de poder llegar. Los cambios tampoco dieron un aire nuevo al equipo, ni Alvarito ni Mangada ni Romera, que llevaba toda la semana sin entrenar y entró en los últimos minutos.
Solo un milagro puede hacer que el Hércules dispute el 'play off' de ascenso, empezando este domingo por la derrota del Mérida en Fuenlabrada. Fue bonito mientras duró.
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