La travesía por el desierto que le espera al Elche de Beccacece
Los franjiverdes, ya descendidos, aún deben enfrentarse al Atlético, Sevilla, Cádiz, Athletic y Getafe para cerrar una temporada aciaga
Al Elche se le va a hacer eterno el final de Liga. Ya se sabía el desenlace desde hace varios meses, pero una vez consumado el descenso matemático toca pelear por nada, competir sin la recompensa de los puntos y alargar el chicle de una temporada aciaga en el año menos deseable, el del centenario.
El conjunto de Sebastián Beccacece demostró en Almería que la goleada ante el Rayo (4-0) fue un mero accidente y la nueva derrota condenó a los franjiverdes al descenso matemático a falta de cinco partidos, todo un mundo porque es cuando la Liga se pone más interesante y la mayoría de equipos se juega la vida. No será el Elche, que ya sabe que el año que viene militará en la categoría de plata.
Beccacece invitó a los aficionados ilicitanos «a disfrutar» de estos últimos partidos en la élite, pero está por ver que la gente recoja el guante y acuda al Martínez Valero cuando no hay nada en juego. En el próximo partido como local, domingo 14 de enero, sí que está garantizada una buena entrada porque acude un rival mediático como el Atlético de Madrid, con numerosas peñas en la provincia y que de la mano de Simeone está acabando el curso como un tiro (nueve victorias en los últimos diez partidos, con el único traspié del Nou Camp).
Además de al Atlético, el Elche recibirá en el Martínez Valero al Sevilla y al Cádiz, mientras que visitará al Getafe y al Athletic de Bilbao. En su línea de las última semanas, Beccacece seguirá realizando pruebas de cara a la temporada que viene y apelando al orgullo y la profesionalidad de sus jugadores.
En la sombra, el dueño franjiverde Cristian Bargarnik y el entrenador ya trabajan en la confección de la plantilla de la temporada que viene, cuyo único objetivo será el regreso a Primera. Se espera una apuesta económica fuerte aprovechando la ayuda por el descenso, pero está por ver si siguen jugadores con mercado de élite como Lucas Boyé, Edgar Badía, Gerard Gumbau, Omar Mascarell y Pere Milla.