Agustín Carrilero, ESIC Comunidad Valenciana: «Los nuevos másteres de Alcoy nacen como respuesta a las necesidades de las empresas de la zona»
El director del Campus de la Comunidad Valenciana habla de la nueva oferta formativa que ofrecen en Alcoy fruto de la alianza con AITEX, de la inteligencia emocional «necesaria» en las aulas y de las razones por las que el modelo ESIC ostenta tasas de empleabilidad tan elevadas
SUPLEMENTOS
Lunes, 11 de septiembre 2023, 07:29
Hay tres claves que definen a ESIC Marketing & Business School. La primera es su metodología puramente práctica, que trata de acercar lo máximo posible la realidad del mercado laboral a los estudiantes. La segunda es la condición de profesionales de todos sus docentes, que son CEOs, directores de marketing o empresarios que vierten todos sus conocimientos en el aula. Y la tercera, quizás no tan conocida como las dos anteriores, es la inteligencia emocional. En palabras del propio director del Campus de la Comunidad Valenciana de ESIC, Agustín Carrilero, «si algo otorga solidez y forma parte del sello de calidad de ESIC, eso es la formación en valores».
La escuela de negocios se encuentra en plena expansión. Muestra de ello es la nueva oferta formativa que ofrece en Alcoy. Tras la firma de una alianza con el Centro de Innovación e Investigación AITEX, los alicantinos ya pueden optar a nuevos másteres y posgrados en dirección de empresas, marketing, comercio y ventas. Destaca especialmente el Máster en Dirección de Empresas de Moda Sostenible, puesto que nace como respuesta a una fuerte industria textil en los alrededores de la ciudad alicantina. Carrilero pone en valor precisamente eso: «Nuestra oferta formativa siempre trata de dar respuesta a las necesidades y las nuevas tendencias del mercado laboral».
En TODOAlicante hablamos con él para que nos hable de esa nueva alianza con AITEX, de la metodología práctica de ESIC, del uso de la inteligencia emocional en las aulas y de la necesidad de impartir una educación empática con los alumnos y adaptada a la realidad actual.
-ESIC tiene un 93% de empleabilidad. Es una cifra elevadísima, y más teniendo en cuenta que, en general, a los jóvenes no les es fácil encontrar trabajo. ¿Cuál es la clave de un porcentaje como este?
-Hay muchas claves. Para nosotros, este índice es resultado de que la formación y las competencias que impartimos están cerca de la realidad del mercado laboral y de las necesidades de las empresas. Las empresas son conscientes de que el alumno que ha recibido formación en ESIC puede hacer una aportación de valor. Esto es algo que, personalmente, me han dicho muchas veces. Jóvenes que, con muy poca experiencia por su juventud, ya tienen la visión empresarial desarrollada. Esto forma parte de nuestra metodología. Los alumnos aportan valor a las empresas desde el día uno.
-ESIC tiene la particularidad de ofrecer un programa impartido íntegramente por profesionales del marketing. CEOs de empresas, directores de marketing o empresarios pasan por las aulas. ¿Qué beneficios tiene este tipo de educación sobre el alumnado frente a la metodología tradicional puramente teórica?
-Hay varias ventajas. Una que es fundamental es que preparamos a los alumnos con un punto de vista doble: técnico, evidentemente; pero también a nivel competencial. Cuando tienes en el aula a un directivo de empresa que en su día a día toma decisiones complejas, surge en él la capacidad de inspirar a los alumnos alrededor de esas competencias.
Cuando incorporamos a profesionales dentro de ESIC como docentes, no solo valoramos su experiencia y su carrera profesional, sino también que el profesor tenga la capacidad de inspirar y comunicar al alumno. El objetivo es que, de alguna manera, el alumno vea en su profesor a un referente que le permita enamorarse de la profesión; que los alumnos admiren a sus profesores no solo por aquello a lo que se dedican, sino también por lo que son, por su manera de afrontar las cosas y por su actitud.
-¿Qué otras claves diferenciales tiene ESIC con respecto a otras universidades?
-Todos los años hago un viaje con mi familia en agosto. Normalmente, aparte de hacer turismo como tal, me acerco a alguna universidad referente si la hay en la ciudad que visito. Estos años he conocido algunas de las mejores del mundo. En una ocasión, mi hijo me dijo: «Jo, papá. Pero estas universidades os superan en recursos, en historia e incluso en conexiones con el mundo empresarial». Entonces, yo me preguntaba: ¿Somos tan buenos como ellos en alguna cosa? Y creo que, de hecho, hay tres cosas: la primera es el empeño que desde ESIC ponemos en intentar atender a cada alumno con su nombre y apellido para que alcance sus metas. La segunda es el fomento del trabajo en equipo y el afán de servicio y compromiso de ESIC. Y la tercera es que tenemos muchos antiguos alumnos (después de tanto tiempo los llamaría amigos) que contribuyen a la solidez y el prestigio de ESIC. Es emocionante ver que los antiguos alumnos se convierten en directivos que a su vez escogen a otros nuevos alumnos de ESIC. En la Comunidad hay 10.000 antiguos alumnos, y cuando ves las posiciones profesionales que tienen, ves que algo habremos hecho bien.
-La alianza con AITEX surgió con la pretensión de ofrecer más oferta formativa en Alcoy. ¿Cómo está funcionando esto? ¿Habéis tenido buenos resultados?
-Lo cierto es que estamos sorprendidos. La ilusión que demostró toda la junta directiva de AITEX desde un inicio ya nos hizo tener muy buenas sensaciones, pero es que los resultados están siendo realmente buenos, tanto en matriculaciones como en la demanda de perfiles profesionales por parte de las empresas.
-De la alianza con AITEX ha surgido una nueva oferta educativa que se imparte en Alcoy, donde ahora se podrá estudiar dirección de empresas, marketing, comercio y ventas. Me gustaría que me hablaras de estos nuevos másteres y posgrados.
-Por encima de todo, destacaría un máster que hemos lanzado en exclusiva y que este año tendrá su primera edición en AITEX. Se trata del Máster en Dirección de Empresas de Moda Sostenible. Hay un gran tejido empresarial alrededor de la zona de Cocentaina y Alcoy. El sector textil tiene un peso muy importante, así que hemos creado un programa orientado a la formación de directivos en la industria de la moda y la confección. Está hecho ad hoc a las necesidades que nos han trasladado las empresas asociadas a AITEX. Es un máster que nace como respuesta a esa necesidad.
Luego tenemos el Máster en Dirección de Marketing y Gestión Comercial. Es un máster con enorme recorrido en ESIC. Llevamos ya 75 ediciones con gran resultado. Ha estado 30 años en Valencia y ahora lo llevamos también a Alicante. Tiene una enorme salida profesional.
Después está el Máster en Digital Business, cuyo nombre lo dice todo. Se basa en asumir la dirección de una compañía desde un enfoque digital y con conocimientos estratégicos en transformación digital. Esto aporta muchísimo valor. Cualquier empresa, del sector que sea, tiene beneficios si integra la tecnología digital.
-En un artículo que escribiste tú mismo en LAS PROVINCIAS en 2019, hablabas de la importancia de combinar en las aulas la disciplina que sea con la inteligencia emocional. Hablabas de ella como algo indispensable en un mundo como el actual. Esto lo dijiste hace ya cuatro años. ¿Sigues pensando igual?
-No dije nada que no pudiera haber dicho en 2010, ni que ESIC no pudiera haber dicho en el año 1975, cuando abrió sus puertas. En ESIC somos humanistas y, lógicamente, queremos incorporar las últimas tecnologías y conocimientos a las aulas, pero hay algo que nos da solidez y que forma parte de nuestro sello: la formación en competencias. No es tan importante lo que sabes, sino la capacidad de aprender y desaprender, y eso pasa por una sólida formación en competencias. La inteligencia artificial ha hecho que cada día sea menos importante memorizar. En ese sentido, la inteligencia emocional es indispensable.
-¿Cómo ves el futuro de la educación? ¿Crees que todas las universidades navegarán hacia una metodología más práctica, hacia una mayor especialización…?
-No sé si será ese el camino, pero sí es el camino deseable. Hay unos índices altísimos de fracaso escolar en España. Hay muchísimos alumnos que realizan formaciones de grado y postgrado sin empleabilidad. Creo que una forma de intentar reducir esos números es haciendo autocrítica. Es necesario ver en qué se puede mejorar. Cuando veo que hoy en día a los niños se les sigue enseñando sin demasiadas diferencias con respecto a la educación que yo recibí, me pregunto cómo es posible que el mundo haya cambiado tanto y la educación no le haya seguido el ritmo. Hay que adaptarse, ser rápidos, ágiles, tener mucha más empatía con lo que el mercado laboral exige. ¿De verdad es tan importante que tu hijo sepa qué día libró Aníbal su primera batalla? Creo que es más importante que sepa cómo era el entorno de la época, las vicisitudes que sufría la gente, las causas que llevaron a esa batalla... La capacidad de memorizar fechas no es tan importante.
-Los jóvenes se enfrentan actualmente a grandes dosis de incertidumbre laboral y de perspectivas de futuro. ¿Qué mensaje te gustaría lanzar a todos ellos? ¿Hay espacio para el optimismo en una situación así?
-Ese espacio para el optimismo siempre debe estar presente. Es fundamental mantenerlo. Hay que hacer un ejercicio de autocrítica y entender que se ha de optar por carreras que te permitan disponer de salidas profesionales. Hay una frase mítica: «Estudio esto porque es lo que me gusta». ¿De verdad tienes totalmente claro lo que te gusta con diecisiete o dieciocho años sin haber probado la mayoría de las cosas? En el mercado laboral hay problemas para encontrar perfiles para determinados trabajos y luego tasas de desempleo importantísimas en otros trabajos. Hay que intentar encajar aquello que a uno le gusta y aquello que ofrece el mercado laboral.
-¿Tiene ESIC futuros proyectos que puedas compartir conmigo?
-Tenemos proyectos muy bonitos en el corto, medio y largo plazo. Vamos a poner en marcha ciclos formativos de grados superiores para 2024, si todo va según lo previsto. También desarrollaremos nuevos grados y posgrados que sigan respondiendo a las necesidades del mercado laboral. Debemos tener la capacidad de adaptación y el despliegue de competencias necesarias para cubrir esa necesidad.