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Imagen de la inspección al coche ahora inmovilizado TA
La Policía Local inmoviliza un taxi y le impone 9.000 euros en sanciones por «deficiencias graves»

La Policía Local inmoviliza un taxi y le impone 9.000 euros en sanciones por «deficiencias graves»

Entre los defectos tenía los sistemas de apertura de las puertras traseras rotos, cinturones de seguridad bloqueados y asientos forrados de cinta aislante

Sábado, 5 de octubre 2024, 10:54

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Es una práctica muy común, sobre todo, entre los turistas del modelo residencial, es decir, el de larga estancia; y un problema frecuente en muchos destinos turísticos del mundo: los taxis ilegales. A poco que se conozca a un grupo más o menos numeroso de residentes de otras nacionalidades, sobre todo de personas con una edad avanzada, de la Marina Baixa, se puede constatar que algunos prefieren confiar en servicios de transporte fraudulentos para sus desplazamientos al aeropuerto que en los taxis.

Con el precio siempre siendo el mayor reclamo de estas propuestas ilegales, pocos clientes se paran a pensar en los graves peligros a los que se exponen al hacer uso de los mimos ya que no están sometidos a los mismos estándares de calidad y seguridad que los taxis legales.

Por ello, la Policía Local de Benidorm lleva ya unos días formándose en la inspección de todo tipo de vehículos de transporte ya que, como explica el portavoz del cuerpo, Quique Tortosa, «desde las concejalías de Seguridad Ciudadana y Movilidad se está promoviendo la formación especializada para los agentes que tienen destino en tráfico o transportes porque se ha detectado una serie de incidencias en algunos vehículos que están haciendo el transporte de viajeros como si fueran taxis, pero no tienen las licencias pertinentes».

Un taxi legal inmovilizado

Precisamente por ello, no ha dejado de sorprender el hecho de que este mismo viernes la Policía Local, en el transcurso de uno de esos controles, haya decidido inmovilizar un taxi perteneciente a la flota legal de Benidorm e imponerle una sanción de «más de 9.000 euros» por las «muy graves deficiencias» que presentaba en cuestiones de seguridad.

Fuentes de la Policía Local han explicado a TodoAlicante que, entre otras lindezas, «tenía los sistemas de apertura de las puertas traseras rotos, los cinturones de seguridad bloqueados, los asientos traseros forrados con cinta adhesiva y sin su acolchamiento pertinente y en su interior tenía elementos cortantes de la propia estructura del vehículo».

Con este largo catálogo de irregularidades, explican las mismas fuentes, «las sanciones impuestas suman un total de más de 9.000 euros» y, por supuesto, «el vehículo se ha inmovilizado hasta que se subsanen las deficiencias».

Pese a todo, el portavoz de la Policía Local de la capital turística de la Costa Blanca, Quique Tortosa, ha subrayado que «es importante recalcar que el servicio de taxis de Benidorm es totalmente seguro» y que, de hecho, pese a lo llamativo de la situación, «este caso es la prueba ya que se detectan las irregularidades de inmediato».

Taxis piratas

En cualquier caso, y pese a esa peligrosísima anécdota coincidente en el tiempo con esa acción formativa que están llevando a cabo los agentes policiales de Benidorm, el mayor peligro para los usuarios siguen siendo los taxis piratas ya que, como insiste Tortosa, «son vehículos particulares carentes de cualquier tipo de distintivo y funcionan por el boca a boca entre los turistas, mayoritariamente de origen británico».

Y ese, como se explicaba al principio de este artículo, es el gran problema ya que, contrariamente a lo que sucede en otros lugares del mundo, donde uno puede encontrarse al conductor pirata ofreciendo sus servicios en la salida de la terminal aeroportuaria o en plena calle, en Benidorm la oferta se mueve de otra manera. Casi indetectable.

A estos taxistas ilegales no les hace falta ofrecer sus servicios de manera pública ya que, como explica Tortosa, son los propios turistas «los que se facilitan entre ellos el teléfono» del conductor. «Sin licencia van haciendo esa recogida de pasajeros» que, principalmente, funciona para los trayectos «entre Benidorm y el aeropuerto».

Sin estadísticas

Tan complicado de controlar es este negocio paralelo a la actividad turística reglada que «no tenemos una estadística real. Sólo tenemos lo que llamamos la 'cifra negra', es decir, los que hemos denunciado», argumenta Quique Tortosa.

El portavoz de la Policía Local reconoce que «no sabemos cuántos hay en total». Un control que, aunque los agentes siguen formándose para poder realizar de manera todavía más eficiente, es muy complejo por la propia casuística de este tipo de infracción y eso impide tener una estadística fiable.

En ese sentido, añade Tortosa que lo que sucede en estos casos es que «cuando localizamos a uno de estos vehículos y procedemos a su inmovilización y a la denuncia del conductor, ese mismo conductor podría seguir con la actividad alquilando otro coche o comprándolo».

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