Cientos de coches retirados de la DANA se acumulan junto a una zona protegida de Muro

Centenares de coches para el desguace se agolpan desde hace unos días en el término municipal de Muro, lindando con una zona protegida. Esta multitud de vehículos proceden de la zona devastada por la DANA, tal y como ha denunciado la Colla Ecologista La Carrasca-Ecologistes en Acció, que alerta del gran riesgo medioambiental que esto supone. Se espera que esta situación siga por lo menos durante este fin de semana, y es que la intención del Ayuntamiento es proceder con la retirada a partir del próximo lunes.

Según explican los ecologistas, la zona donde están depositados temporalmente esos vehículos es «totalmente inadecuada», puesto que se encuentra en zona rural común forestal, a unos 20 metros del Riu d'Agres y tocando el Paisaje Protegido del Serpis y el Paraje Natural Municipal Font del Baladre-Fontanars-Riu d'Agres. «Además, según el visor cartográfico de la Generalitat Valenciana los terrenos tienen una permeabilidad media y en parte alta; también están parcialmente en zona con peligro de inundación» explican.

El riesgo medioambiental viene dado por los fluidos y elementos contaminantes que contienen los vehículos, como la gasolina, diésel, aceites de motor, anticongelantes, refrigerantes, líquidos de freno, baterías, etc. «El lugar adecuado para ellos sería un centro autorizado de tratamiento, como el que la empresa propietaria o arrendataria de los terrenos tiene a menos de un kilómetro de distancia», explica La Carrasca.

«La solidaridad no puede utilizarse como excusa para hacer las cosas mal, depositando los vehículos al lado del río, en un lugar claramente sensible, creando un nuevo peligro para la natura y las personas. Hace más de dos meses de la riada y ya tendrían que haberse buscado ubicaciones provisionales en condiciones para dejar los vehículos de manera segura hasta que pudieron tratarse correctamente, y evitar así tener que trasladarlos innecesariamente, con el incremento de riesgos que esto comporta», explican los ecologistas.

El escenario más temido en este caso sería la lluvia, que podría hacer que los agentes contaminantes fueron arrastrados en el río; «también hay que tener en cuenta el peligro de incendio, que comportaría un riesgo sanitario importando para la población, que se encuentra a menos de 200 metros», explican las mismas fuentes.

Ante el anuncio del Ayuntamiento de retirar los coches a partir de este lunes, La Carrasca pide que mientras tanto, se extreme el control, y que se analicen los terrenos para descartar la contaminación del suelo y, en caso contrario, que se lleve a cabo su descontaminación.

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