Expulsado de España un británico durante diez años por tratar de quemar la Serra Gelada
La Audiencia Provincial le impuso una pena de tres años de cárcel que ha sido conmutada por el destierro
Nada más comenzar el verano de 2022, el día 22 de junio y a última hora de la tarde, el Parc Natural de la Serra Gelada fue el escenario de uno de los mayores 'sustos' que este paraje natural ha vivido en los últimos años cuando se produjeron hasta tres conatos de incendio que obligaron a un amplio despliegue de medios de extinción terrestres y aéreos para evitar que el fuego consumiera grandes áreas de la zona protegida que comparten Benidorm y l'Alfàs del Pi.
Desde el primer momento, las autoridades tuvieron claro que los fuegos habían sido intencionados y que habían sido obra de una misma persona o, a lo sumo, de tres actuando de manera coordinada. Por ello, mientras los bomberos y agentes forestales se afanaban en apagar el fuego, la policía se desplegó en las inmediaciones del parque para tratar de detener al pirómano.
Esa operación dio sus frutos y los agentes consiguieron detener a un varón británico de 54 años de edad cuando trataba de huir del lugar de los hechos. En el momento de su arresto, el hombre ya se encontraba en la trama urbana de Benidorm, en la zona del Rincón de Loix.
Ahora, casi ocho meses después de aquel suceso, la Audiencia Provincial de Alicante ha condenado al pirómano a una pena de tres años de cárcel que ha sido conmutada por diez años de expulsión del territorio español.
En su sentencia, el tribunal considera probado que el condenado realizó su acción «a sabiendas de que soplaba un fuerte viento de Poniente» que iba a dificultar las labores de extinción y que, por sus características, ayudaría a la propagación de las llamas.
Además, las pruebas de cargo contra el ahora condenado eran de peso ya que en el momento de su detención todavía llevaba con él una mochila en la que los agentes de la policía encontraron diversos útiles para hacer fuego.
El propio acusado reconoció todos los hechos y asumió su responsabilidad en el suceso cuando declaró en la vista llevada a cabo en la Audiencia Provincial el pasado día 16 de marzo.
Además de esa pena de expulsión por diez años de España, que se hará efectiva el próximo día 31 de mayo –momento hasta el que permanecerá ingresado en prisión–, el Tribunal ha impuesto al condenado una multa de 12 euros diarios durante 20 meses y tendrá que asumir los costes de las labores de extinción que ascienden a 11.742,57 euros (8.255,01 euros correspondientes a los medios de la Generalitat Valenciana y 3.498,56 a los bomberos del Consorcio Provincial de Alicante).
