Las nuevas líneas triunfan en Alicante y el bus urbano gana dos millones de usuarios

Tras 50 años de conesión a Vectalia entró a gestionar el bus la UTE MIA, compuesta por la propia Vectalia, Subús y Masatusa. Con varios meses en funcionamiento, las nuevas líneas han conseguido uno de los retos que se propusieron cuando se implementaron allá a principios de año: recuperar los usuarios fugados por la pandemia.

Según informa la Concejalía de Movilidad Urbana en este primer semestre de 2023 se han contabilizado 9,1 millones de pasajeros, casi dos millones más que los anotados durante el mismo periodo del pasado año, un 27,6% más de usuarios entre enero y junio.

Tanto la concesionaria como el Ayuntamiento achacan a la entrada de las nuevas líneas la subida de los usuarios del transporte público urbano rodado. Trayectos como la 14, circular por Gran Vía, la 28 que conecta las playas y el Hospital de San Juan, o la 22, que se amplió hasta el PAU 5, han tenido una buena acogida que se ha traducido en números.

Desde el área de Movilidad se han resaltado «los buenos datos» que se han anotado en este semestre». El Concejal, Carlos de Juan, ha asegurado que estas cifras «ponen de manifiesto la buena aceptación que están teniendo las mejoras introducidas en el servicio desde la adjudicación del nuevo contrato y la puesta en marcha de las nuevas líneas».

Desde el consistorio aseguran que buena parte de este incremento se concentra en el desdoblamiento de la línea 7/7P, que conecta el casco urbano con los polígonos industriales de la periferia de la ciudad. En cinco meses, la línea 7P ha registrado unos 14.375 pasajeros.

Unos datos a los que cabe sumar los 61.623 usuarios de la línea 7 que pasa por estas áreas empresariales y que continua hasta el Rebolledo. Un aumento del 41% respecto a cifras del 2022 de este trayecto.

Zonas otrora olvidadas, como la Gran Vía, han vuelto a estar conectadas gracias a las nuevas líneas. La 14, una circular por esta carretera, ha registrado 146.278 pasajeros, un aumento del 289% respecto a las circulares A y B anteriores a este modelo y que no conseguían un volumen alto por sus bajas frecuencias.

Las dos líneas que pasan por el arenal de San Juan han triundado y han subido sus pasajeros. El autobús 28 suma 409.065 usuarios, mientras que la 22, con su ampliación hacia el PAU 5 anota 575.505, un 27% más respecto al mismo periodo del año anterior.

De hecho la mejora de las frecuencias es una de las claves. El aumento de buses «ha permitido mejorar la eficiencia del servicios», según ha explicado de Juan, quien subraya que corresponde a algunas de las peticiones de usuarios y conductores para mejorar los itinerarios.