Un ángel al amanecer

La vida cambia en un instante. Una decisión, un destino, un encuentro. Como el que tuvo un anónimo alicantino con un agente de la Policía Local. Fue su ángel en un amanecer en el Postiguet. Gracias a que se cruzaron, el agente pudo salvarle la vida del infarto que le dio mientras corría por el arenal alicantino.

Meses después, no se le ha olvidado. Conmovido todavía aún, ha querido agradecer en una carta que el relato de su vida «se hubiera escrito de otra forma sin su actuación». Y pide poder conocerlo personalmente.

Los hechos ocurrieron un día cualquiera de este verano. Como tantos cientos de alicantinos, este entrenador salió a correr igual que cada mañana por el paseo del Postiguet. Pero esa iba a ser diferente. De repente, se sintió indispuesto. Estaba sufriendo un ataque al corazón.

También era un día normal para este agente de la Policía Local. Patrullaba con su compañero cuando se encontraron con un hombre desplomado en el paseo. No dudaron ni un segundo. Gracias a la formación a los policías locales pudieron estabilizarle hasta que llegaron los servicios sanitarios y se lo llevaron al hospital.

«¡Inimaginable cuánto tenemos que agradecerles!», apela este alicantino. Que detrás tiene amigos, hijos, sobrinos. Un gesto que ha salvado una vida, pero que ha cambiado la de todos los del entorno de este corredor. Que ahora puede volver a ver más amaneceres como aquel del verano en el que se encontró a su ángel.