El PSOE de Benidorm acusa a Ortiz de «chulear» a la ciudad «con el permiso del PP»

Castillo ha apuntado no sólo a Ortiz, al que acusa de «chulear» a la ciudad, sino también hacia el alcalde de Benidorm, Toni Pérez, que, asegura, «sigue permitiendo y consintiendo que la Estación de Autobuses continúe en estado ruinoso».

El portavoz adjunto de los socialistas ha criticado, tras visitar las instalaciones, que «no ha habido ninguna mejora a pesar de que hace ya cuatro meses que el equipo de gobierno del PP aprobó adjudicar la gestión de la estación a una empresa de Enrique Ortiz».

En una durísima intervención, Castillo no ha tenido reparos en calificar al empresario como «corrupto confeso» y ha valorado que «consiguió el contrato que quería gracias al PP». Pese a ello, «la situación es de absoluto abandono. Si hace cuatro meses culminó su burla a la ciudad, ahora además chulea a Benidorm con el permiso del Gobierno del PP y mantiene la estación en un estado tercermundista».

El portavoz adjunto socialista ha señalado que «la degradación de la estación cada día va a más con numerosos desperfectos, pantallas informativas que no funcionan, accesos cerrados, locales abandonados, ascensores rotos y mucha suciedad acumulada».

«Lamentablemente todo va a peor, y seguimos ofreciendo la peor de las imágenes en una de las principales entradas de la ciudad tras años de incumplimientos por parte de Ortiz que debería de tener la estación en perfecto estado», ha añadido el edil de la oposición.

Sin escatimar en calificativos, Castillo añadía, en alusión a Ortiz, que «este delincuente confeso que está al frente del servicio de gestión se ha reído de siete corporaciones municipales y lo sigue haciendo con la complacencia del PP».

El portavoz adjunto ha destacado que «es el momento de exigir explicaciones a quienes dieron la cara por este empresario. En el pleno de julio se nos dijo que se vigilaría el cumplimiento de las condiciones de esta infraestructura municipal, pero este señor amigo del PP hace lo que quiere. Y esta es la lamentable imagen de la ciudad para miles de turistas que vienen a Benidorm».