A machetazos por un móvil en Alicante
La Policía Nacional detiene a un hombre por querer zanjar con un arma blanca de grandes dimensiones una riña con un conocido a causa de un teléfono
Agentes de la Policía Nacional han detenido en Alicante a un hombre de 42 años y de nacionalidad argelina por atacar con un machete a otro sujeto, conocido suyo, en el transcurso de una discusión por un teléfono móvil.
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Al parecer, la víctima había prestado un terminal al detenido y cuando le solicitó que se lo devolviera comenzaron una discusión, en la que el detenido golpeó a la víctima con un machete en la cabeza, según informa la Comisaría Provincial alicantina.
Un hombre también de Argelia, de mediana edad y con una herida en la parte frontal izquierda de la cabeza, pidió ayuda muy alterado en la Comisaria de Policía Nacional de distrito Norte de Alicante. Al parecer, un amigo suyo había intentado «matarlo».
Un coche patrulla de la Brigada de Seguridad Ciudadana de Policía Nacional atendió a la víctima, recabando todos los datos necesarios sobre lo que había ocurrido y solicitó la presencia urgente de una ambulancia.
Fase de adquisición de información
Según las manifestaciones de la víctima, comenzó una discusión con un conocido suyo por un teléfono móvil que le había prestado. El agredido pidió al detenido que le devolviera el terminal de su propiedad y al negarse se desencadenó un fuerte enfrentamiento.
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En un momento de la trifulca, el autor se marchó del lugar y volvió poco tiempo después con un machete de dimensiones considerables. Golpeó fuertemente a la víctima en la cabeza y le causó una herida sangrante que necesitó asistencia médica de urgencia.
Durante la agresión, el perjudicado fue ayudado por dos personas más que se encontraban allí, las cuales pudieron mediar con el autor para que desistiera de su actitud. Finalmente el detenido huyó, no pudiendo ser encontrado por las patrullas de Policía Nacional que intervinieron en el lugar.
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Colaboración ciudadana
La Policía Nacional informa de que la colaboración ciudadana desempeña un papel fundamental en el mantenimiento de la seguridad pública. Cuando los ciudadanos y la policía trabajan juntos, se fortalece la capacidad de prevenir y resolver delitos, destaca.
Proporcionar información oportuna sobre actividades sospechosas, participar en programas de vigilancia comunitaria y establecer canales abiertos de comunicación contribuye a construir una relación de confianza mutua.
La actuación de un particular frente a un delito está protegida por las leyes españolas, por lo que si se es testigo de un delito flagrante, no solo se puede avisar, sino que también se puede socorrer e incluso retener de manera particular.
Esta colaboración no solo mejora la eficacia policial, sino que también fomenta un sentido de responsabilidad compartida en la protección de la comunidad y el bienestar de sus habitantes, según destacan fuentes policiales.
Los funcionarios de Seguridad Ciudadana de la Policía Nacional localizaron a algunos testigos de los hechos y recuperaron imágenes del autor del delito. Además, se pudieron encontrar fotografías donde el sospechoso estaba siendo sujetado por varios hombres, que parecían estar arrebatándole el machete.
La víctima fue trasladada al Hospital General, donde fue atendida y puesta en observación, siendo necesario el uso de «grapas» para conseguir cerrarle la herida.
Primeras labores investigativas con éxito
El Grupo de Delincuencia Violenta de Policía Judicial de la Policía Nacional en Alicante se hizo cargo de la investigación. Lograron identificar al presunto autor, además de recopilar otros datos de interés sobre el mismo.
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Se hicieron las primeras labores operativas para localizar al delincuente, averiguando el domicilio donde vivía y los lugares que frecuentaba. Aunque se estableció un círculo sobre estos lugares y sobre las personas con las que se le había visto en otras ocasiones, no se le pudo localizar.
Finalmente se pudo descubrir que el supuesto agresor podía haber huido a Murcia o sus alrededores. La Policía Nacional puso en aviso a los servicios policiales de aquellas localidades, para que tuvieran conocimiento de lo sucedido e hicieran uso de las medidas de protección necesarias en el caso de toparse con el detenido.
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Deposito de cierre y detención
Una vez averiguado por «donde se podría estar moviendo» su detención se produjo escasos 15 días después de los hechos, siendo practicada dentro de un salón de juegos de una localidad de Murcia. El varón se vio sorprendido por un dispositivo creado para su localización y detención en aquel lugar, realizado por funcionarios de la Comisaria Provincial de Policía Judicial de Alicante.
El detenido, que carecía de antecedentes hasta estos hechos, pasó a disposición de los Juzgados de Instrucción en funciones de Guardia de Alicante, quedando la investigación abierta a falta de valorar las posibles complicaciones médicas de la víctima por las lesiones sufridas, aunque se encuentra estable y fuera de peligro, añaden fuentes policiales.
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