El Segura entra en situación de emergencia
Enero ha sido el más seco en la última década y el sistema está en su peor nivel desde 2017
El sistema del río Segura se encuentra en niveles de emergencia, según el último informe de la Oficina Técnica de la Confederación Hidrográfica que el organismo de cuenca ha hecho público. Los niveles registrados a 1 de febrero de 2024 son los más bajos desde octubre de 2017 después del enero más seco en una década.
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El organismo de cuenca ya ha comenzado a tomar medidas. La primera, convocar la Comisión Permanente de la Sequía y empezar a tramitar las autorizaciones para la apertura los pozos a partir del próximo 1 de mazo. También de los pozos localizados en Albacete con destino exclusivo para el abastecimiento en el caso de que la Mancomunidad de los Canales del Taibilla (MCT) los necesitase.
El mes de enero ha sido el más seco en la última década, con solo 12,4 litros por metro cuadrado de precipitaciones registradas, mientras que la media del año hidrológico (que comenzó en octubre) es de 29,3 litros por metro cuadrado. En el mes más frío del año ha caído menos de la mitad que en el resto.
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La Oficina Técnica de la Sequía pone de relieve que no se han registrado precipitaciones en los últimos meses, lo que ha conllevado una caída «muy significativa» de los volúmenes embalsados. Las reservas contienen 206 hectómetros cúbicos, un 18% de su capacidad. El año pasado se encontraban con 443 hectómetros cúbicos y 565 en la media de la última década.
Ahora, solo cabe esperar que febrero sea bastante más benévolo en cuanto a precipitaciones se refiere. Los pronósticos de la Agencia Española de Meteorología (Aemet) apuntan que la presencia de precipitaciones a partir de este viernes en la vertiente mediterránea por la llegada de un carrusel de frentes atlánticos que atravesarán la península. Por su parte, la Aemet pronostica un febrero «húmedo o muy húmedo», aunque sea en la parte oeste del país.
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Las precipitaciones llegarán a la provincia de Alicante a partir del viernes, pero serán totalmente insuficientes. Para evitar restricciones, sería necesario que lloviera de continuo un mes y medio, algo bastante improbable.
Lo único que se salva son los embalses del Tajo, que han recuperado nivel gracias a las últimas lluvias de enero y que serán capaces de enviar hasta 27 hectómetros cúbicos a través del trasvase, un alivio para los agricultores después de que en los últimos meses hayan recibido solo 15 hectómetros cúbicos.
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