Diez medidas para mejorar la limpieza de San Vicente

El alcalde de San Vicente del Raspeig, Pachi Pascual, ha presentado el plan de diez medidas implementadas desde diversas concejalías para mejorar la limpieza de la ciudad con la mayor inmediatez posible. En palabras del primer edil, «en estos primeros cien días de Gobierno nuestra prioridad ha sido recuperar un servicio que estaba en sus peores momentos y, para ello, se ha recurrido a la búsqueda y estudio de nuevas soluciones y a una reorganización exhaustiva de los recursos disponibles, que no son muchos, para hacer visible a corto plazo un cambio favorable de la imagen de la ciudad que los vecinos empiezan a percibir».

La primera, la limpieza extraordinaria de vertederos incontrolados en el término municipal, ha permitido recoger por el momento 154 toneladas y eliminar 76 puntos negros por acumlumación de residuos del municipio, situados principalmente en las partidas rurales. Pascual ha señalado que en los próximos días se actuará en 37 espacios más de las zonas de Girasoles, Rodalet y Velódromo.

Según el primer edil, «es imprescindible la presencia de agentes y la intervención de medios, como drones, para la detección de comportamientos incívicos que inciden en la contaminación de la ciudad y de su entorno». También se incidirá en la imposición de las sanciones que contempla la ordenanza municipal, que parten desde los 700 euros, «porque así nos lo está pidiendo la ciudadanía, que reclama que se identifique a los infractores reincidentes» ha asegurado Pascual.

La quinta acción detallada es el nuevo contrato especial de desinfección e higienización de entornos sensibles. La concejal de Sanidad, Mercedes Torregrosa, ha asegurado que esta propuesta para desinfectar, desratizar y desparasitar espacios se puso en marcha hace dos semanas y se mantendrá hasta mayo de 2024 «con la finalidad de actuar alrededor de los colegios, bibliotecas, centros sociales y de mayores o el Mercado Central, entre otros lugares, en los que hemos querido reforzar la limpieza con un dispositivo especial dedicado a ello».

Torregrosa ha asegurado que también se han intensificado las labores de adecuación de espacios públicos con un control exhaustivo de parques y plazas «que, en algunos casos, han terminado siendo utilizadas como pipicanes». Con la supervisión de los técnicos, se están sustituyendo las plantas y árboles deteriorados en espacios como las plazas del Pilar, Gustavo Adolfo Bécquer y Lillo Cánovas. Los trabajos continuarán el próximo año con una mayor dotación presupuestaria.

Entre las medidas aplicadas, desde el mes de julio también se está trabajando en la reestructuración de los servicios de limpieza viaria con el estudio de nuevas rutas de limpieza, un sistema de baldeo más eficiente y una mayor atención a las zonas de alrededor de los contenedores. «Se trata de sacar el máximo partido a los recursos que tenemos y creo que ya se están viendo los resultados en las calles, según nos trasladan los vecinos», ha añadido Díaz.

El concejal ha mencionado, además, el inicio de un proceso de renovación de los contenedores por otros depósitos más modernos y accesibles que comenzará este otoño, con una inversión de 900.000 euros, y está previsto que continúe durante los próximos ejercicios. Otra de las actuaciones destacadas es la reanudación del servicio de desbroces que ha estado dos años inactivo, ya adjudicado por 670.000 euros. El edil de Servicios Urbanos ha explicado que se prevé que entre en funcionamiento en un plazo aproximado de un mes.

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