El Consell hará obras de urgencia en el Rico Pérez para evitar la ruina del estadio
El IVF alerta de que si no actúa ya surgirán daños estructurales que impedirán el uso del recinto
El Rico Pérez está en la UCI y la Generalitat pretende salvarle. El Consell intervendrá en el Rico Pérez con 500.000 euros para mejorar su seguridad y su imagen. Así lo ha anunciado el presidente de la Generalitat Valenciana, Ximo Puig, en una entrevista con la Cadena Ser, en la que ha asegurado que ya está hablando con la directiva del club y que la intención es comenzar las obras en mayo.
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Esta primera intervención será el preludio del gran proyecto de la Generalitat: el 'Arena Alicante'. La empresa encargada de convertir el Rico Pérez en un recinto multiusos que servirá como espacio deportivo, cultural y de ocio es Eguesan Energy, domiciliada en Las Palmas de Gran Canaria.
La sociedad ganadora de la licitación ofrece servicios diferenciados de asesoramiento en materia de contratación pública y derecho administrativo orientados a las necesidades y exigencias del mercado desde el año 2009. Asimismo, según destaca, posee experiencia acreditada en otros proyectos del sector deportivo como puede ser la elaboración del expediente y cuenta con tres delegaciones de trabajo, localizadas en Las Palmas de Gran Canaria, Madrid y Zaragoza.
La propuesta incluye un estudio de las posibilidades urbanísticas y la rentabilidad que se podría alcanzar incorporando espacios y usos colindantes al estadio. También adjunta con detalle cómo se realizaría el estudio de la viabilidad económica y financiera de la instalación para conseguir el nuevo modelo de negocio.
El propietario
El Rico Pérez pertenece desde 2017 a la Generalitat, concretamente al Instituto Valenciano de Finanzas (IVF), entidad de derecho público de carácter empresarial cuya finalidad es actuar como principal instrumento de la política financiera del Consell y que dirige Manuel Illueca. El ente financiero autonómico pagó 1,2 millones de euros por el 15,07% de las acciones del club y el estadio.
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El IVF observa con preocupación la situación de conservación y alerta de que si no actúa ya surgirán daños estructurales que impedirán el uso del recinto. Así lo ha asegurado el director de la entidad, Manuel Illueca, que ha destacado el mal estado de algunos elementos del recinto durante el partido entre el Intercity y el el Fútbol Club Barcelona «que se encontraban en una situación muy poco apropiada para la celebración de espectáculos deportivos».
Un encuentro que estuvo en el foco del panorama nacional y los medios de comunicación se hicieron eco del pésimo estado del recinto. Las butacas estaban en un estado deplorable, en la Grada del Mundial había localidades que carecían de ellas; cuartos de baños inutilizados; mobiliario anticuado y problemas con el sonido.
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Nada nuevo para los herculanos habituales, a los que se les identificaba por su gesto resignado. Ni que hablar de las cabinas de prensa. Los profesionales de la comunicación se quejaron al ver las condiciones en las que tenían que realizar su trabajo: pocas cabinas y sin espacio, con una única red wifi que dejó de funcionar dos horas antes del partido.
Illueca asegura que el Instituto dispone de un informe elaborado por una consultora privada que «si bien pone de manifiesto que no hay daños estructurales que en este momento pongan en peligro la seguridad de las personas que asisten al estadio, sí que es verdad que hay daños de conservación que de no ser atendidos podrían derivar en una situación de daños estructural del estadio Rico Pérez.
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El director del IVF considera que es una cuestión que no pueden dejar que suceda y admite que tienen que intervenir en el estadio «arreglando esas pequeñas deficiencias observadas lo antes posible desde luego antes de que se celebre la próxima temporada», algo en lo que van a trabajar en las próximas fechas.
Sucesos
La realidad del Rico Pérez es triste. Abandonado, con el equipo en el peor momento de su historia y episodios al borde de la desgracia. El pasado enero una verja se desprendió por el viento y, afortunadamente, no hubo que lamentar heridos, tan solo la rotura de la luna de un coche estacionado en las inmediaciones.
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El estadio está en precario, no es la primera vez que una parte del recinto se desprende. En 2013, antes de un entrenamiento, parte de la estructura de una de las torres de focos del Rico Pérez se vino abajo y quedó suspendida en el aire, lo que requirió la intervención de los bomberos.
El pasado viernes en los alrededores del estadio, sobre las 17.30 horas, se produjo una reyerta con armas blancas y objetos contundentes que acabó con un muerto y dos heridos. Cuando los policías de la Brigada de Seguridad Ciudadana llegaron al lugar de los hechos encontraron a los tres hombres agredidos sangrando abundantemente. Uno de ellos estaba tirado en el suelo, inconsciente, y con heridas en diferentes partes del cuerpo.
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