Interceptan en el puerto de Alicante siete coches robados que iban a ser enviados a Argelia

Golpe policial al tráfico ilícito de vehículos en el puerto de Alicante. La Policía Nacional ha interceptado siete coches robados cuando iban a ser embarcados en el Ferry de Argelia y ha arrestado a los cuatro presuntos responsables del envío, según han confirmado desde la Comisaría Provincial.

Los vehículos decomisados, procedentes de empresas de renting y leasing, habían sido manipulados en aras de ocultar su origen. En unos casos se alteraron los elementos identificativos, mientras que en otros se falsificó el certificado provisional de matriculación francés. En cuanto a los detenidos, señalan las mismas fuentes, están acusados de los delitos de robo de vehículo, apropiación indebida y falsedad documental, dependiendo de la naturaleza de cada caso.

La operación ha sido llevada a cabo por los agentes del Grupo de Tráfico Ilícito de Vehículos de la Brigada Provincial de Policía Judicial de Alicante, quienes realizaron en el Puerto de Alicante inspecciones aleatorias en vehículos que iban a ser embarcados en el ferry con destino Argelia. Los coches incautados han quedado depositados en la ciudad a la espera de que sus legítimos propietarios se hagan cargo de los mismos.

La investigación descubrió que uno de los turismos interceptados había sido robado en Francia a principios de año, el cual presentaba modificaciones en sus elementos identificativos, una práctica conocida en el argot policial como 'maquillaje', utilizada para dificultar su rastreo. Sin embargo, el intento de ocultar su origen resultó inútil.

Durante una inspección superficial, los agentes advirtieron que el número VIN -el código que identifica de forma única a cada vehículo- no se ajustaba a los estándares habituales. Este indicio les llevó a realizar una revisión más exhaustiva del automóvil, en la que confirmaron la manipulación del resto de sus elementos identificativos.

Los efectivos observaron que tanto el VIN visible como el VIN frío del vehículo habían sido manipulados, así como que la etiqueta del fabricante también presentaba irregularidades. De hecho, señalan fuentes de la investigación, había disparidad con respecto al tipo de grabado y la morfología de los caracteres alfanuméricos empleados. Además, detectaron trazas erróneas en su grabado que lo hacían incompatible con el tipo de grabado empleado en su fabricación.

Posteriormente, las pesquisas llevaron a los investigadores hasta dar con los datos reales del vehículo, descubriendo que había sido sustraído a principios de año en Francia, por lo que se detuvo al hombre que lo pretendía embarcar en el Ferry con destino a Argelia, de 42 años, como presunto responsable de los delitos de robo de vehículo y falsedad documental.

Otras de las maniobras ilícitas conocidas por los especialistas es la manipulación de los certificados provisionales de matriculación obtenidos en el país galo. En estos casos, el objetivo perseguido por los autores es doble; por un lado facilitar tráfico ilícito, dado que sobre el VIN original de un vehículo se pueden crear varios vehículos falsos para introducirlos en circulación, ocultando así la titularidad real del automóvil y, por otro, evitar pagar impuestos de matriculación de una placa definitiva.

Así es como operan con los vehículos de renting o leasing, puesto que la documentación obtenida en gestorías, compraventas, etc. Sin embargo, quien se ocupa de rellenar los datos esenciales del vehículo a la hora de solicitar estas matrículas provisionales son los propios clientes a través de la página web de tráfico del gobierno francés, por lo que, quien solicita este tipo de placas de matrícula es muy consciente de lo que hace y del motivo por el que lo hace, llegando a encontrarse casos en los que la persona que figura como propietaria del vehículo no tiene constancia de tener ese vehículo a su nombre.

Por ello, dado que en Francia la validez de un permiso de matriculación provisional es de cuatro meses, es una práctica común falsificar este permiso cambiando las fechas de validez o algunos de los dígitos del VIN, con el fin de extender ese periodo provisional ilícitamente y evitar pagar a la hacienda pública francesa.

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