Alcalde de Callosa de Segura

Manuel Martínez, alcalde de Callosa: «No tengo miedo a una moción de censura»

A Manuel Martínez Sirvent (PP) , alcalde de Callosa de Segura, le ha tocado enfrentar el segundo mandato más difícil que podía imaginar. En minoría, con la espada de Damocles de una posible moción de censura y un exalcalde por su partido ahora enrolado en su propio proyecto, confiesa que no pone la mano en el fuego a que acabará la legislatura, pero asegura que eso no le hará caer en el cortoplacismo. «Todo lo que se haga a futuro será bueno para Callosa».

–¿Con qué animo afronta este segundo mandato?

–Con el mejor de los ánimos, ¿no? Este equipo se presentó a la reelección porque lo que estaba en juego era continuar con los proyectos y con esa nueva forma de hacer política. Consideramos que se nos ha renovado la confianza en la calle y hemos sido la fuerza más votada aunque gobernemos en minoría.

–¿Qué tareas tiene con Callosa?

–Es mucho el trabajo que queda. Lo primero era abordar una reestructuración del Ayuntamiento. Somos un municipio de 20.000 habitantes y necesitamos una administración bien engrasada. Después hemos empezado con los proyectos. Por ejemplo, la red de saneamiento, que estaba en un estado deplorable y ahora estamos haciendo una red de pluviales. Otro tema es la seguridad. Para nosotros es un asunto fundamental. Estamos dotando a nuestra policía de más y mejores materiales y estabilizando la plantilla con nuevos procesos selectivos. Además, estamos a punto de terminar la construcción de la nueva jefatura. Por otra parte, aunque no sea nuestra competencia, hemos retomado las conversaciones para crear un nuevo colegio de Primaria y vamos a reivindicar la necesidad de ampliar el centro de salud.

–El pasado mandato se concluía ese gran dique en el barranco de La Ahumada, ¿cuáles son las próximas obras?

–Ya se está finalizando el colector de pluviales en la calle de la Rambla, que la que más agua recoge. Nuestro objetivo es que todo ese agua vaya a parar al azarbe Moncada y, de ahí, a una gran balsa para almacenarla, de modo que se pueda reutilizar para riego al mismo tiempo que evitamos inundaciones. Ya tenemos el convenio firmado con el Juzgado de Aguas.

–En cuanto a seguridad, la otra pata la pone la Guardia Civil. ¿Tendrán su nuevo cuartel en el antiguo IES Vega Baja?

–Estamos todavía en conversaciones con la Guardia Civil. Es una gran obra que no solo daría servicio a Callosa, también a los pueblos de alrededor. Ya hemos solicitado una subvención para la rehabilitación del edificio. Lo que pasa es que no es suficiente. Entonces estamos buscando otras fuentes en el Ministerio del Interior. Son cuatro millones y para nuestro ayuntamiento eso es hipotecar las inversiones de los próximos cinco años.

–En cuanto al nuevo colegio, ¿está ya decidida la parcela?

–Se le presentó una parcela a Conselleria. Tenemos ya la aprobación de lo que es la creación del nuevo centro, que sería el número cinco y lo que estamos esperando es a que nos den la idoneidad para continuar con los trámites o buscar otra.

–Sin embargo, la configuración del Pleno es compleja, ¿hasta qué punto compromete los proyectos?

–Es cierto que no tenemos una mayoría absoluta, por lo tanto, también somos conscientes de que se ha iniciado un tiempo diferente en el que tendremos que buscar siempre el consenso y el diálogo. No obstante, eso no nos puede paralizar, tenemos que tener la iniciativa.

–Los sueldos seguirían bloqueados de no ser por Fran Maciá (PSOE) ¿le veremos pactando con los socialistas más a menudo?

–Vamos a hablar con todos los que quieran hablar con nosotros. Ya luego está también la responsabilidad que cada grupo quiera obtener. Y todas las explicaciones que ha dado 'a posteriori' el portavoz del PSOE, pues son la realidad. Llega un momento en el que nosotros habíamos dado muestras de querer ir adelante y por eso salieron adelante otros asuntos que se han dado por primera vez en nuestra historia democrática, como por ejemplo que haya miembros de la oposición que presidan comisiones informativas o sean representantes del Ayuntamiento en otros organismos.

–Lo que más ha dinamitado la política local ha sido la aparición de la UCIN, el nuevo partido del exalcalde popular, Javier Pérez, ¿es imposible la reconciliación entre ustedes?

–Imposible no hay casi nada. Ahora, aquí no estamos para salvar egos o ideales personales. Tenemos por delante lo que es la gestión de una ciudad, entonces yo siempre voy a poner por encima de todo los intereses de Callosa. Cada uno ha tomado sus decisiones y ha elegido su camino. Todo el mundo conoció candidato por este partido independiente después de intentar serlo por Vox, España Suma o Ciudadanos y, todo, mientras era asesor de la Diputación para el PP.

–¿Tiene miedo a que un día él y el PSOE se entiendan para una moción de censura?

–No, miedo no, porque desde el primer momento yo sé que no tengo mayoría absoluta y que la moción de censura está ahí. Mi miedo, de normal, es a no hacer las cosas bien.

–¿Pondría la mano en el fuego a que podrá agotar el mandato?

–No, no la pongo porque es algo incierto. El pasado mandato la amenaza de la moción también estaba. Aun así, no quiero gobernar pensando en el corto plazo, sino a futuro. Todo lo que se haga pensando en el largo plazo será bueno para Callosa.

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